Ambicioso, sereno, denso, poderoso, elegante, arriesgado e irregular biopic sobre la figura de Abraham Lincoln, bajo la dirección del siempre correcto y sofisticado, Steven Spielbarg, apostando por presentar y desarrollar la historia de lucha por confeccionar las leyes de unión en Estados Unidos, con la colosal y deslumbrante interpretación de un genio como Daniel Day- Lewis.
Spielberg, se rodea y apoya en sus colaboradores habituales, apostando por una exquisita y cuidada calidad de imagen y sonido, para desarrollar una historia que se le va de las manos, dejando que su entusiasmo por la labor de un enorme Daniel Day- Lewis, llegue a ser lo más interesante de un producto que olvida ofrecer entretenimiento y fluidez en el desarrollo de los acontecimientos históricos.
Lincoln, queda como un producto ambicioso y desmesurado del que solo puedo salvar la descomunal transformación de un enorme y memorable, Daniel Day- Lewis.