Atrevida, personal, intrigante, sencilla, eficaz, preciosista, profunda, brillante, elegante, sutil, inteligente, sofisticada, enigmática, sugerente, salvaje, dulce, interesante, poética y emocionante producción de suspense y terror que se adentra en un mundo lleno de imaginación creado en la mente de un niño para hacer frente a la realidad de la enfermedad.
J.A. Bayona y los responsables de la película presentan y desarrollan la historia de una forma inteligente y sugerente, con la que ir introduciendo al espectador en una historia de fantasía que deriva posteriormente en todo un drama de suspense emocionante.
Los responsables de la película juegan a sugerir y no mostrar, potenciando el misterio y el suspense alrededor de una serie de imágenes llenas de ingenio y atrevimiento, para llevar al público a otro mundo que lo aleje de la realidad.
Fabulosa forma de jugar con la ingeniosa belleza de las imágenes, para construir y ofrecer un relato inquietante y perturbador relato que busca encontrar emociones.
Un monstruo viene a verme, tiene la elegancia y el estilo de potenciar el suspense con un juego de imágenes ingeniosas y diferentes, con las que desarrollar una historia emotiva.
Lo que personalmente más me ha llenado y gustado es su cuidado e ingenioso estilo visual, aunque debo decir que no me llegó a convencer por completo. Belleza visual para una historia de realidad desgarradora.