James Wan nos demuestra una vez más que no solo sabe dirigir en el género de terror (Expediente Warren, Saw, Insidious) y en el de acción (Saga Fast & Furious) si no que en esta ocasión, el director se adentra en el mundo de DC, consolidándose y ganándose el respeto de los fans del género. Aquaman es precisa, extremadamente entretenida y disparatada.

No pretende demostrar nada, el espectador se encuentra perfectamente con lo que el largometraje pretende desde el primer minuto, puro entretenimiento sin ser pretenciosa. Como puntos positivos destaco el ritmo constante sin llegar a decaer en ningún momento, las actuaciones son correctas, destacando a Jason Momoa y Amber heard como protagonistas principales, como secundarios recalco el personaje de Nicole Kidman, breve pero clave en el desarrollo de los acontecimientos y comentar también la actuación desaprovechada de Patrick Wilson (conocido por las entregas de terror de Insidious y Expediente Warren), un personaje que podría haber dado más juego pero que no disgusta del todo, recayendo en los típicos villanos sobrados de clichés por los cuatro costados.

Hacer mención también a las escenas de acción, muy buenas pero algunas con algunos fallos de CGI y sobre todo resaltar la espectacular escena de acción por los tejados de Sicilia.

Como valoración final, deciros que me ha parecido una película muy entretenida, una película de superhéroes que no pasará a la historia pero si se hablará de ella durante años. Esperando impaciente una secuela. Gracias de nuevo James Wan.