“Furia ciega” es basura cinematográficamente hablando. Quiero empezar por dejar esto claro del todo antes de seguir con mi crítica. Puede que sea una película diferente, macarra, que mezcla varios géneros a la vez y todo aquello que se te ocurra pensar en su defensa (y ojo que no digo con esto que dichas cosas no puedan ser ciertas), pero el guión es una absoluta trochería, una estupidez absurda que no tiene ni pies ni cabeza. Así pues, le voy a dar un 4 de nota y creo que ya me estoy enrollando tela al hacerlo.

No sé muy bien lo que ha querido crear el director. A lo mejor una cinta de culto, un filme original en la medida de lo posible o quizás una de esas películas estrambóticas que se hacen para llamar la atención… o puede que incluso nada de eso, sino que simplemente haya querido rodar algo “entretenido” con el mero objeto de llenar la saca. No lo sé a ciencia cierta, pero el caso es que no le ha salido la cosa muy bien que digamos. El filme se deja ver sin mayores problemas, de acuerdo, pero prácticamente se podría decir que eso es sólo lo que ha hecho bien.

Amber Heard está muy buena, William Fichtner (Alexander Mahone para los amigos) hace todo lo posible por ofrecer una digna interpretación, las escenas de acción están bien filmadas y, por último, en líneas generales, el apartado técnico resulta más que decente. Todo esto no lo voy a negar en ningún momento. No obstante, ¿esto es suficiente para justificar su visionado? Pues, sinceramente, lo dudo mucho. Lo dudo mucho porque he tenido la sensación al terminar de verla de que me han tomado el pelo a base de bien.

Nicolas Cage lleva ya bastante tiempo cuesta abajo, de culo y sin frenos a la hora de elegir sus trabajos. Hasta hace poco le daba cuartelillo porque admiro a los actores que no tienen sentido del ridículo y que se atreven a interpretar cualquier personaje por muy exótico que sea. Sin embargo, este actor creo que aquí ha tocado fondo de una vez por todas. Vaya tela la imagen tan lamentable que da con esa peluca rubia platino…