¿Qué puedo añadir que no se haya dicho ya? Muy poco, casi nada o más bien nada, por lo tanto, dejaré mi opinión personal, en formato lista, como único reclamo por si alguien desea leerla, qué por supuesto, será corta.


¡Para gusto, están los colores! Nunca fue más cierto este refrán, qué en esta ocasión:

-Primeros planos llenos de movimiento que consiguen hastiar.

-Desarrollo de la historia muy, pero que muy aburrido y lleno de tópicos (El dinero. La ceguera. El juicio. Etc…) y llenos de elementos fantásticos y libertades artísticas y argumentales para engrandar los sentimientos a transmitir.

-Moraleja final de que U.S.A. es un espejismo lleno de maldades para los pobres e inocentes emigrantes de buen corazón (¡cómo si hubiera países de buena caridad!), idea demasiado socorrida y repetitiva.

-Ceguera, el tema principal para dar pena, pero a ello se le une el amor por soñar, por bailar y cantar, pero creo que hoy en día, incluso el más sano del mundo, tiene un sueño, y si uno desea su sueño, el esfuerzo o la suerte son dos “deidades” siempre presentes, por lo tanto, no hay nada especial que entender.

-Canciones, aparte de ser coreografías pésimas, si alguien se fija en la letra, verá que dicen poco, como la de los 107 pasos al patíbulo, que sólo es un conteo, pero bien entonado.

-Björk, como actriz fue espesa, como cantante se salva.


Cada uno vea lo que quiera ver. Cada cual la valore como desee, desde “Basura” hasta “Obra Maestra”, pero para un servidor no deja de ser una película del eterno montón, que pasados 360 días ni recordaré.