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McMartigan rating:
5
5.9
35,311
Thriller
An action-thriller centered on the threat posed by a deadly disease and an international team of doctors contracted by the CDC to deal with the outbreak. Meanwhile, the whole world panics as doctors race to find a cure for a rapidly spreading virus that kills its victims within days.
Language of the review:
- es
November 1, 2011
7 of 11 users found this review helpful
"Contagio" no está mal. Es una buena película, con mucha buena gente detrás de las cámaras, encabezados por el siempre eficaz Steven Soderbergh, y con un reparto de auténtico lujo saliendo en cada escena, con un buen número de premios Oscar o nominaciones a sus espaldas. Pero es una película tal vez víctima, no del virus que narra en su metraje, sino de sus propias y ¿altas? expectativas.
"Contagio" es un cúmulo de quieros y no puedos, de historias entrelazadas -o no- que prometen ser intensas o exhaustivas, pero que no se les da el tratamiento que todos -o al menos yo- esperamos. Vemos escenas que parecen incompletas -en spoiler-, tramas teóricamente importantes pero que reciben una elipsis narrativa tras otra -en spoiler-. Personajes que se pasean en sus escasas tomas -son demasiadas historias, y tal vez demasiado poco tiempo para desarrollarlas- con oficio, pero más por parte de su calidad como intérpretes que de la profundidad de sus papeles.
Dejando virus aparte, "Contagio" también habla de las siempre peligrosas epidemias.. de terror, que motivan siempre una gran cantidad de dosis de caos y violencia: asaltos, robos, violaciones, asesinatos.. Lo peor de nosotros mismos, no es nuestra debilidad hacia las bacterias, sino cómo aprovechamos la situación para dar rienda suelta a nuestros instintos animales. Pero una vez más, ese tema se nombra y se muestra como de pasada, con el ansia didáctica de mostrarlo todo, de manera resumida, para acaparar el máximo número de conceptos.
Otro grandísimo error: Twitter/Facebook/Blogosfera. Términos que se nombran frecuentemente asociados al personaje Jude Law -también poco definido, puesto que su manera de pensar REAL no queda clara, al menos no totalmente-, y que sirven para propagar una red de supuestas mentiras o falsas verdades que se expanden por todo el mundo y en cuestión de minutos. Otra clarísima epidemia, la (des)informativa, tan dañina como la propia epidemia viral, o al menos eso nos quieren dan a entender.. Pero por desgracia, es otro tema que también se muestra de pasada.
El problema es que tocando por encima esos conceptos.. Obviando casi por entero el tema de internet y sus blogs tremendistas, lo enfocan todo a la hora de la verdad como las películas que ya se hicieron anteriormente, y para ver un clon de "Estallido" prefiero ver la original, que me parece mucho más seria.
Interesante. Pero un quiero y no puedo.
"Contagio" es un cúmulo de quieros y no puedos, de historias entrelazadas -o no- que prometen ser intensas o exhaustivas, pero que no se les da el tratamiento que todos -o al menos yo- esperamos. Vemos escenas que parecen incompletas -en spoiler-, tramas teóricamente importantes pero que reciben una elipsis narrativa tras otra -en spoiler-. Personajes que se pasean en sus escasas tomas -son demasiadas historias, y tal vez demasiado poco tiempo para desarrollarlas- con oficio, pero más por parte de su calidad como intérpretes que de la profundidad de sus papeles.
Dejando virus aparte, "Contagio" también habla de las siempre peligrosas epidemias.. de terror, que motivan siempre una gran cantidad de dosis de caos y violencia: asaltos, robos, violaciones, asesinatos.. Lo peor de nosotros mismos, no es nuestra debilidad hacia las bacterias, sino cómo aprovechamos la situación para dar rienda suelta a nuestros instintos animales. Pero una vez más, ese tema se nombra y se muestra como de pasada, con el ansia didáctica de mostrarlo todo, de manera resumida, para acaparar el máximo número de conceptos.
Otro grandísimo error: Twitter/Facebook/Blogosfera. Términos que se nombran frecuentemente asociados al personaje Jude Law -también poco definido, puesto que su manera de pensar REAL no queda clara, al menos no totalmente-, y que sirven para propagar una red de supuestas mentiras o falsas verdades que se expanden por todo el mundo y en cuestión de minutos. Otra clarísima epidemia, la (des)informativa, tan dañina como la propia epidemia viral, o al menos eso nos quieren dan a entender.. Pero por desgracia, es otro tema que también se muestra de pasada.
El problema es que tocando por encima esos conceptos.. Obviando casi por entero el tema de internet y sus blogs tremendistas, lo enfocan todo a la hora de la verdad como las películas que ya se hicieron anteriormente, y para ver un clon de "Estallido" prefiero ver la original, que me parece mucho más seria.
Interesante. Pero un quiero y no puedo.
SPOILER ALERT: The rest of this review may contain important storyline details.
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Spoiler:
No entiendo la escena de la autopsia de uno de los fallecidos, cuando los forenses descubren algo en su cerebro que JAMÁS se nos explica, aunque parece ser la bomba. Pasa de ser una escena supuestamente importante en la trama, a quedar en la nada.
También me resulta raro el escaso respeto que siente el guionista hacia la figura de la doctora Orantes -Marion Cotillard-, cuya investigación supuestamente importante es silenciada por la banda sonora y una sucesión de escenas que nos conducen a su secuestro y supuesta integración con una aldea china, con la cual al final sufre un claro síndrome de Estocolmo. Y por cierto, el tiempo que he tardado en escribir el resumen de su historia es el tiempo que le dan en pantalla. Exagerado, pero no por mucho.
También resulta extraño que el científico que no se sabe por qué, Ian Sussman, se niega a destruir las muestras del virus, y experimenta con ellas arriesgando su vida hasta encontrar una cepa sólida desde la cual trabajar hasta encontrar la vacuna. Un héroe, que no sale antes más que en un par de escenas -menos de dos minutos- y no vuelve a salir jamás.
También me resulta raro el escaso respeto que siente el guionista hacia la figura de la doctora Orantes -Marion Cotillard-, cuya investigación supuestamente importante es silenciada por la banda sonora y una sucesión de escenas que nos conducen a su secuestro y supuesta integración con una aldea china, con la cual al final sufre un claro síndrome de Estocolmo. Y por cierto, el tiempo que he tardado en escribir el resumen de su historia es el tiempo que le dan en pantalla. Exagerado, pero no por mucho.
También resulta extraño que el científico que no se sabe por qué, Ian Sussman, se niega a destruir las muestras del virus, y experimenta con ellas arriesgando su vida hasta encontrar una cepa sólida desde la cual trabajar hasta encontrar la vacuna. Un héroe, que no sale antes más que en un par de escenas -menos de dos minutos- y no vuelve a salir jamás.