'Goldeneye' en el momento en el que lo vi por primera vez hace un millón de años me pareció una de las mejores películas de James Bond, y tras el último revisionado anoche, lo sigo pensando.

Pierce Brosnan viene a ser como el Raúl de los agentes 007, no es un 10 en nada, pero es un 8 en todo. La versión del agente británico por su parte viene a ser muy apuesto (que no sexy), muy duro (que no violento) y muy elegante (que no estirado), y su trabajo en 'Goldeneye' fue de notable. Lástima que en las siguientes películas la historia no le acompañase.

Es en esta película donde el Bond de este actor tuvo la mejor narrativa y los mejores personajes de acompañamiento. No solo la nueva 'M' interpretada por Judi Dench que terminó siendo un icono de toda la saga y 'Q' interpretado por Desmond Llewelyn que haciendo muy poco hace mucho, sino que los villanos y los personajes secundarios estuvieron a la misma altura que Bond haciendo que todo el peso de la cinta no recaiga exclusivamente en 007 y que cada personaje tenga su lucimiento.

Después de este hoyo en uno que fue el debut de Pierce Brosnan los siguientes largometrajes no estuvieron a la altura, y es esta la que considero la mejor entrega de la 'era Brosnan' con diferencia. Hasta la canción de los créditos cantada por Tina Turner es potente.