En ésta película, el actor Christian Bale ya apuntaba maneras de ser un actor con una prometedora carrera y a día de hoy, 11 años después de American Psycho, lo ha demostrado sobradamente.
En American Psycho, interpreta a un yupie, un metrosexual, un ejecutivo neoyorquino, cuya fachada de hombre perfecto, cuerpo perfecto, belleza perfecta, vestimenta perfecta y estilo de vida perfecta, se esconde un absoluto desgraciado de la vida, víctima de una sociedad nihilista, supéflua y frívola en la que vive y desprecia.
Christian Bale, aguanta con solvencia y soltura todo el peso interpretativo de la película, creando así uno de los personajes más desquiciados e interesantes que ha creado el séptimo arte. A su alrededor pululan otros personajes que pasan casi desapercibidos, pero que retratan perfectamente esa sociedad decadente y frívola.
Para terminar, me quedo con una escena que describe perfectamente la frivolidad y estupidez del personaje y demás que le rodean. En una reunión de trabajo, Patrick Bateman, discute con sus compañeros, no de una cuestión del trabajo, sino de sus tarjetas de visita, cómo estaban escritas, con que tipografía, qué calidad de papel tenía la tarjeta. La escena termina con un Bateman cabreado y ofendido porque su tarjeta no era la más bonita ni la mejor.
En el spoiler dejo mi interpretación del final.