"Nosferatu" es una obra maestra desde el punto de vista de sus avances en el lenguaje audiovisual: la estética expresionista, el uso de las sombras, los efectos especiales y el maquillaje, y un enfoque diferente de otras adaptaciones de "Drácula" por tratar el vampirismo como una plaga.

Pero señores, seamos sinceros: es un soberano coñazo. Y menos mal que dura 80 minutos y que ya me conocía la historia al dedillo, porque al que le pille de nuevas es imposible que entienda algo de lo confusa que es su narrativa. Dicen por ahí que da miedo. Sí, siempre y cuando uno haya decidido que va a pasar miedo antes de ver la película o si es menor de diez años. Supongo que eso de "creer" que uno pasa miedo con cualquier clásico del terror es un ejercicio de esnobismo inherente a la profesión de crítico cinematográfico.

Puesto que la versión de Werner Herzog también era un contundente ladrillo, me quedo sin duda con la versión de Coppola, que no es perfecta pero se "benefició" de 70 años de evolución en la manera de contar historias y tiene una primera hora para enmarcar. Después de esto no sé porque le doy un cinco. Que cojones, le voy a dar un cuatro, a ver si me voy a convertir yo también en un "enterao".