El paso de los años y los inevitables cambios en los sistemas de información, principalmente debido al perfeccionamiento de la tecnología, han hecho que una película como "The Paper (Detrás de la noticia)" quede como ejemplo de un cine que es imposible que se realice en la actualidad. Podrán hacerse versiones, podrá derivar la idea original en un remake, pero ya nadie sabe lo que es el bullicio y el hervidero de las oficinas de un periódico que cada día tiene que sacar una tirada de su número, en papel por supuesto, batallando por conseguir la noticia exclusiva, comparándose inevitablemente con la competencia y con una presión financiera diaria por sacar adelante los números.

Hoy clickas y tienes las noticias actualizadas al minuto, entrevistas nuevas al día. En nuestra pantalla, qué digo, es en plural: en nuestras pantallas, móvil, ordenador, portátil o tv. ¿Qué son 25 años?; apenas un suspiro si se entiende lo que quiero apuntar, es el tiempo que va desde la época de esta película y la actualidad. Nostalgia, mucha nostalgia. Si no te comprabas el periódico podías ver la tele o escuchar la radio, pero cómo ha cambiado todo. No hablo con la certeza del profesional, pero creo que lo que se vive en "The Paper (Detrás de la noticia)" no es posible vivirlo hoy.

Me quedo con todos los personajes, pero la melancolía que transmite Duvall está por encima del resto, él es un tío que lamentablemente ve acercar su final y se da cuenta de los errores que ha cometido en su vida. No creo que se arrepienta ciertamente, pero estoy seguro que cree que podría haberlo hecho mejor. Los demás, perfectos en su sitio, con una vida estresada al límite, dispuestos a todo por cumplir con su trabajo, porque lo hacen por vocación, viven y trabajan por lo que es su vocación. Qué puta envidia me dan en parte, pero qué tristemente esclavizados también.