Realmente, por lo que se lee, es un homenaje acertado a un escritor que navegó entre todas las drogas que encontraba en su camino, Burroughs, que también le daba por jugar con su mujer a Guillermo Tell con resultados no muy acertados. El descalabro que acabo de ver está repleto de referencias directas a la biografía de este escritor, a sus paranoias, alucinaciones, y ese extraño trayecto entre la realidad exterior y todo lo que se cocía en su cerebro mientras estaba puesto. El problema no es desconocer la vida y obra de este hombre, "El almuerzo desnudo" tiene un problema gravísimo relacionado con la lógica, de la que carece absolutamente, y no siendo ciencia-ficción, tiene todos los motivos para que aparezca muchísima pereza ya desde los primeros momentos. Qué mal le sienta a cualquier película carecer de historia!!!

Cuando todo es un despropósito tras otro, el único aliciente de no entender nada es ver bichos raros, máquinas de escribir transformadas en cucarachas, ciempiés o alimañas sin forma conocida. Así que todo el interés tiene que ver con las ganas de entender la mente de un hombre drogado, explícitamente puesto, lo cual no tiene que ver con mis gustos. La historia, ausente... Y eso en el cirector canadiense no, nunca, no es el mismo Cronenberg que otras veces me ha maravillado