No sé si es porque nos acostumbramos a verlos solo en cortos divertidos, en un rol secundario sin tener que cargar el peso de un argumento completo o como figuras decorativas que alivianaban cualquier situación. El hecho es que “Minions” (2015) no solo es decepcionante sino que es un atentado a creaciones que teníamos evaluadas con bastante más fortuna antes de esta aventura en solitario.

Dentro de los muchos pecados que se vislumbran tras verla, es que lo divertido de los minions era, por decirlo así, su falta de individualización, algo en lo que se falla desde el inicio al bautizarlos con nombres.

El paso del gac a una cinta de hora y media es desafortunado. Sin ánimo de spoiler o de anticipar algo, un ejemplo es que los cortos que se emiten en los créditos finales resultan mucho más interesantes que la película misma, en una clara muestra de la falta de atención que el público especialmente infantil dará a la cinta.

Cuesta evaluar o precisar qué pasaba por la cabeza de los realizadores al realizar una cinta para público infantil con más de algún contenido que difícilmente logre mantenerlos pendientes.

“Minions” posee un gen adorable y de empatía que es innegable, sin embargo el resultado de su película en solitario, como precuela que narra sus orígenes es al menos decepcionante o cuestionable.

Recomendación:
Floja. Hace cuestionar la necesidad del film mismo y debilita un poco lo querible de los personajes en cuestión.

=Cité de Lord Buyinski= www.buyinski.wordpress.com