No hay duda de que Joss Whedon supo hacerlo muy bien con la primera entrega. La película coral de superhéroes de la “Marvel” (si no tenemos en cuenta a los X-Men) fue bastante satisfactoria, lo cual hace que para realizar la segunda, el listón esté tan alto que era difícil de superar.
Efectivamente, esta “Era de Ultrón” no es superior a la primera, pero yo diría que tampoco está peor, sino que mantiene el nivel, que ya es decir bastante.
Con algunos cambios argumentales respecto a los cómics por problemas de derechos (cosa que a mí personalmente me trae sin cuidado), los vengadores han de enfrentarse a una inteligencia artificial global que quiere traer la paz al mundo (obviamente destruyendo a la raza humana).
Este enemigo toma la forma de un robot, muy vistoso a nivel de diseño de producción. No es el único personaje nuevo, ni mucho menos. Ahí tenemos a los gemelos “mejorados”, que dan también mucho juego en la historia.
Entre los méritos de Whedon está el saber repartir equitativamente el tiempo de película entre tantísimos personajes e historias (creo que solo faltan Natalie Portman y Gwyneth Paltrow). Y aún así, no es como otras de superhéroes en donde todo es un prólogo para una escena de acción al final. Este director es un mago del ritmo y sabe espaciar perfectamente las secuencias frenéticas para que no las echemos en falta, sin dejar de lado el desarrollo de las historias personales de los personajes, y eso que son un montón. La parte de la granja, los “flashbacks” y las penas de la “Viuda negra”, no desmerecen para nada a la película, sino que la enriquecen para que no sea únicamente un derroche de pirotecnica y efectos. Y si a alguien le cansan esas partes, no pasa nada porque la traca final lo compensa todo con creces.
Lo que sí creo que sobra es la escena de la fiesta del principio. No está mal ver a los vengadores relajados y pasándoselo bien, pero me ha parecido un poco fuera de lugar.
Hay que reconocer que es todo un espectáculo para la vista cuando empieza la acción. No faltan los planos secuencia y las brutales coreografías de lucha entre los miembros del equipo de los vengadores. Aún así, noto un excesivo movimiento en la cámara y que los planos son demasiado cortos (en distancia), de manera que no siempre se ven las cosas como deberían. Este fallo no lo tenía la primera parte, y espero que Whedon no se acostumbre a eso, pues me parece una mala práctica de cara al espectador y al resultado en pantalla.
La banda sonora es un lujo también para el oído, fruto de la combinación de Brian Tyler y Danny Elfman, dos expertos compositores.
Creo que el nivel de calidad que estas películas han alcanzado en el género de las adaptaciones de cómic, ha quedado muy difícil de superar. Ofrecen diversión y espectáculo en altas cotas, pero al mismo tiempo no caen en el fallo de los infantilismos y el humor malo. Por esto, es bastante mejor que las películas de cada uno de los vengadores por separado.