Una vez más, para mi tarde de cine me decido a indagar en el de nuestros vecinos galos, un cine que a mí personalmente me encanta y que me da muchas satisfacciones. Esta vez le toca el turno a la guapísima Sophie Marceau, una de las actrices más polivalentes y reconocidas de Francia, maravillosa y delicada, protagonizando esta especie de comedia que, visto el nulo número de comentarios aquí dejados, pasaría sin pena ni gloria por nuestras pantallas. La Marceau es merecedora de toda atención, actriz competente y bella, está perfecta como ese ama de casa hastiada de su insoportable marido, interpretado magistralmente por Vincent Pérez. A este actor de orígen español tuve el placer de conocerlo personalmente hace ya varios años. Nunca me había llamado la atención como actor y no esperaba mucho de él cuando comencé a ver esta película pero tengo que decir que Pérez está magnífico. El tercero en discordia es el para mí desconocido Charles Berling, quién es el que menos me ha gustado del trío protagonista, su actuación no me ha dicho nada. Si no le pongo más puntuación a la película es porque el final me ha parecido que desmerece totalmente todo el buen hacer del resto de ella y que no es el más idóneo para el film, pero aún así, se puede disfrutar de las buenas actuaciones de sus actores y de sus buenos diálogos. Una maravilla si se puede ver en versión original.