Más o menos terminaba el instituto y empezaba la vida cruel y real cuando fui a ver mi primera película del genio Allen –en la gran pantalla- con una amiga. Seguramente había visto más de él sin empanarme de que eran suyas. El caso es que salimos del cine con un regustillo especial, de esto que algo te ha gustado mucho, que te has sentido, incluso, identificada con algunas excentricidades de la cinta; y lloraba, lloraba de risa, porque las chorradas inteligentes que estaba escuchando las sentía ya parte de mí. Y ahora soy una fan consumada de este genio. Leo sus memorias y me muero; no puedo con que escriba que «preferentemente quiero que esparzan mis cenizas cerca de una farmacia» o que de entre todas los largometrajes que ha escrito y dirigido, su favorito sea justo el mío, que es el que menos piensas que es de él, ya sabéis, Match Point.

El guion de Todo lo Demás no deja de ser otra agudeja ingeniosa (soy redundante, pero es así) de un tipo que logra refrescar el ambiente con sus diálogos; y mira que me faltan todavía por ver filmes de él, pero voy entendiendo chistes personales como la parte en la que dice algo así como que «en su primer matrimonio se sentía como si toda la familia de ella estuviera en un círculo diciéndole que ya era parte de la familia, parte de la familia, parte de la familia»; me hace pensar que o nos tomamos la vida como una broma –en plan, parque temático- o estamos perdidos ¿no? No es mi favorita, pero es con la que fui consciente de quién era Allen, y eso le hace tener más valor en mi mercado particular del cine.

Jason Biggs (Amerian Pie) y Christina Ricci (Monster), no es la primera vez que trabajan juntos. Se nota que hay química entre ellos y se compenetran bien. Por otro lado, tener como mentor al mismísimo Allen me encanta y completa el círculo (nunca mejor dicho). Me llama la atención que en esta ocasión Woody Allen son los tres. Normalmente es un actor el que hace del rey de la excentricidad y casi lo hace mejor Ricci que Biggs. Danny DeVito en su papel melodramático total y la breve aparición de otro gran cómico como Jimmy Fallon nos deja un dulce sabor de boca.

Mi recuerdo era bueno, y gracias a Amazon Prime Vídeo he podido volver a verla y disfrutarla.