En primer lugar hay que decir que Mr. Brooks es un asesino "serial", por supuesto psicótico, y que la descripción de sus fechorías y el reguero de sangre consecuente es seguro que no agradarán a muchas personas. Pero si Ud. soporta el género podrá apreciar estupendas actuaciones, inteligentes diálogos y sorpresas propias de este tipo de cinematografía. La peor consecuencia del juego es en este caso, como es frecuente, que hay varias historias accesorias ("sub-plots") difíciles de creer, que complican el argumento y lo hacen difícil de seguir.

Lo más sobresaliente es la relación de las dos imágenes que tiene el personaje (Kevin Costner) de sí mismo, pues su pensamiento fluye como un diálogo entre ambas representaciones, en un conflicto antre ambas tendencias, como en Jekyl y Mr. Hyde.