Este film es como un viaje sensacional en la montaña rusa de una feria, y tiene la onda de un serial, pero sigue siendo de lo mejor en tensión y acción. El taquillero Harrison Ford es Indiana Jones, un arqueólogo y aventurero que viaja por todo el planeta buscando objetos artísticos únicos de gran significación religiosa.

A cada paso encuentra peligros mortales, a veces un tanto excesivos, aunque no son para queja.

El filme posee claras referencias a otros clásicos anteriores, tales como "Las minas del rey Salomón" y "El secreto de los Incas".

El personaje de Indy está bastante copiado del personaje de Harry Steele, encarnado por Charlton Heston en "El secreto de los Incas", en 1954.

Oscars a los mejores efectos visuales y sonoros. El filme se mantiene a flote gracias a prácticamente todo, a excepción de las actuaciones de sus protagonistas.

Uno de los mayores éxitos comerciales de todos los tiempos. Le siguieron, esta vez con menos éxito, Indiana Jones y el templo maldito, con un Ford ya cuarentón, Indiana Jones y la última cruzada, con la super-estrella Connery e Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal, con un Ford ya anciano.

Todo el mundo debe haber visto esta saga.