Una película que busca conscientemente escenas de interior, quizás demasiado, se apoya en un reparto de actores muy capaces, pero ésto por sí solo no es suficiente.
Se echa en falta un guión mas trabajado, si bien en la primera mitad consigue mantener el interés y la coherencia, en la segunda no es tan convincente, y en ocasiones parece errático.
El director se autolimita a planos y secuencias interiores, que precisarían de unos diálogos brillantes para conformar una buena pelicula de este tipo.
Las interpretaciones, muy correctas, no consiguen a mi juicio salvar el conjunto, que se empeña en elaborar un ambiente algo intimista, con silencios abundantes, música grave, etc.
No me ha parecido en absoluto mala, pero quizás prometía mas de la sensación que finalmente me ha dejado.

Supongo que siempre es tentador hacer la segunda parte de una gran película. A veces incluso se consigue mantener el nivel, la idea de la anterior (a mi modo de ver, Avatar, por ejemplo), pero por desgracia no es este caso.
El guión consistente de la primera, unas meritorias escenas de acción que se veían apoyadas en unos personajes bien definidos, diálogos brillantes, tomas de exteriores (e interiores) siempre acertadas, envuelto todo ello en una banda sonora magnífica, se queda en Gladiator II en una sombra de aquella, dando además la sensación de que es mejor que no salga a la luz en ningún momento, pues se sonrojaría a la primera comparación.
Cierto que hay alguna interpretación medianamente sólida, sobre todo Denzel Washington (llena la pantalla en cualquier película) y Pedro Pascal, pero los personajes carecen de personalidad en general, y también hay alguna escena de acción entretenida, sin embargo terminas de verla y puedes olvidarla.
Personalmente prefiero ver otras 3 veces la primera (que ya he visto unas cuantas) antes que repetir la segunda, transmite al espectador en cada toma, cada escena, cosa que no consigue en ningún momento la secuela.
Da la sensación de que ni siquiera ha habido ambición de hacerlo bien, sino de "hacer caja".
Sabemos que era difícil, pero se ha quedado lejos.