Iba con muchas expectativas a la cinta, después de más de una década sin disfrutar de verdad de Spiderman en la gran pantalla.

Había leído que, esta vez sí, habían dado con la tecla, que la película no era otro mejunje de los Vengadores con el arácnido de por medio o que la trama era menos "Disney" que las anteriores.

Cuando solamente llevaba 30 minutos de película ya me quería ir del cine. La trama que estaba dibujando la cinta era un auténtico disparate, sin ningún sentido y, lo que es peor, sin ninguna emoción. Todo era una colección de escenas aisladas con muchas bromas y "moderneces" de por medio. El guion no existía y los personajes secundarios solamente secundaban el disparate.

Siguió avanzando la película y la cosa fue a peor, porque tenía todo el rato la sensación de que yo no encajaba con ese universo que han creado los de Disney para el trepamuros. (Spoilers)