Solo me he decidido a ver esta serie porque estoy confinada en mi casa por la cuarentena y ya me he mirado todas las series buenas.
Cuando era más jovencita recuerdo que me gustó mucho la serie "Compañeros" a la que comparo a esta en que las tramas y personajes solían ser controvertidos y polémicos para dar lugar a debate. La gran diferencia entre esa serie y esta es que en "Compañeros" siempre parecía que había una moraleja y un final sensato a las historias, a parte de que los personajes estaban mucho más definidos. Aquí parece que cada actor se basa en realizar una escena por a lo que pone el guión y siguiendo las instrucciones recibidas, sin preguntarse si su personaje actuaría así en ese momento.

Me da la impresión de que no se conocen ni ellos mismos. No veo que estén comprometidos con su personaje, que va cambiando en sus reacciones en función a las necesidades del guionista en cada ocasión. Muy poco creíble. Por no hablar de que son niños de 16 años que actúan con una intensidad que no es creíble para su edad, es que ni los narcotraficantes profesionales me los imagino así. Ni los más famosos actúan con tanta condescendencia y superioridad hacia los que les rodean en su día a día. Muy forzado. No la recomiendo, ni te sientes bien viéndola, ni deja buen sabor de boca al cerrar los capítulos.