Catalogar esta película con un diez puede que resulte insultante y frívolo para algunos. Se supone que una matrícula de honor deber ser reservada sólo para las obras maestras del cine, para esos clásicos absolutos que todos tenemos en mente. Pero lo siento, no se me ocurre otra nota para mi película española preferida. La única película que me hace llorar cada vez que la veo, siempre en el mismo momento (ver "spoiler").

Manolito Gafotas es mi infancia. Yo nací y crecí en el centro de Barcelona y no en el extrarradio de Madrid, pero las sensaciones que Manolito transmite son las que viví yo. Las mismas. Y Adriana Ozores representa a la mayoría de las madres de mi generación. ¡Qué gran actriz es la señora Ozores!

Comedia divertida, reflejo fiel de la típica familia de la clase media-baja española en los años 80. Gracias a Elvira Lindo, Miguel Albaladejo y todos aquellos que hicieron posible esta maravilla llamada Manolito Gafotas.

Sucede a veces que vuelves a ver una comedia que te encantó en tu adolescencia y de repente...nada. No es el caso de Ford Fairlane. La volví a ver hace poco y me volvió a parecer divertidísima. Hay mucha parida que de mala acaba siendo brillante. Además el doblaje es buenísimo. Las coñas se adaptaron al y a lo español de manera acertadísima. Si todavía no la has visto, ya estás tardando, ridículo. Esta peli es realmente increíble ble.

¿Os acordáis de ese chiste? Mira mamá, sin manos; mira mamá, sin pies; mira mamá, sin dientes. Pues bien, la película va de eso.
Es una de las películas más conmovedoras que he visto. Es la lucha de uno mismo por controlar su destino pero sin medios para conseguirlo. Nunca una persona podrá sentir tal impotencia. A Johnny no le hace caso ni Dios.
Cuando acabes de verla te sentirás como si te hubieran pegado una paliza. Imprescindible.

Me dispuse a ver este clásico del cine y aunque la primera secuencia promete, la película se va diluyendo cual azucarillo. Es como ver a Mr. Bean pero sintiendo vergënza ajena. Después de quince minutos, estaba deseando que acabara esta sobrevalorada y fraudulenta película. El problema no es que ese tipo de humor se haya quedado anticuado. Me encantan las películas de Harold LLoyd, y son bastante más antiguas.