Después de una excelente primer temporada y de leer varias reviews de páginas que vieron la serie antes de su estreno, tenía las expectativas altas. Pero después de ver el primer episodio poco a poco mis expectativas se fueron desinflando hasta que solo terminé la serie por obligación (no me gusta dejar las cosas a medias). No me decepcionaba tanto desde que vi la atrofiada remake de Suspiria de la mano de Luca Guadagnino.

Parece más una temporada de la ahora completamente vacía American Horror Story, que parte del mundo opresivo y casi desesperanzado que Flanagan supo brindarnos en la primer temporada. Entiendo que el enfoque ahora sea más un cuento de estilo "romance gótico", como la increíble Rebecca, de Hitchcock o la contemporánea Crimson Peak, de Del Toro. Pero lamentablemente en Bly Manor no hay ni pies ni cabeza. Puro dialogo que no llevan a ningún lado, personajes carentes de motivos reales para comportarse de la manera en que se comportan, romances de secundaria pero ejecutados por gente que ya va tocando los 40 años. En fin, una depleción. Aun así, el apartado técnico es bueno y entretiene un poco. La recomendaría para ver los domingos o si tuviste una noche de puro alcohol y ahora con resaca quieres ver algo para no pensar, mírala sin culpas.

De lo contrario, si quieren ver una serie que no te toma el pelo y exige atención, les diría que vayan por el thriller británico "The Third Day" producida por HBO y con Jude Law de protagonista, que hasta ahora me ha dejado sorprendido.