Al ver los créditos al final, me di cuenta que había terminado. No me conmovió, no me hizo sentir duda por lo que pasaría. Un guión lineal, sencillo, una historia que creo que más que nada buscaba justificar la fotografía que es realmente buena, es un apocalipsis. Lenta a veces, escenas largas e innecesarias, no me dejó nada más que sensación de haber perdido el tiempo. La comparo con las películas que más me han gustado, que han dejado huella en mi, que me han permitido comprender mejor la vida y esta está muy lejos de eso. Algún intento hubo de mejorar la historia con el Coronel Kilgore, pero sale poco tiempo y no lo desarrollan mucho.
En resumen, un viaje largo a matar a Marlon Brando, que aparece casi siempre en oscuridad y que se funde con las letras de los créditos escuchando el horror, el horror...y listo. Prefiero ser un papasnatas