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Críticas 5
Críticas ordenadas por utilidad
Críticas ordenadas por utilidad
5
2 de agosto de 2010
24 de 29 usuarios han encontrado esta crítica útil
La verdad es que lamento haber visto de nuevo esta película, con 14 años me gustó pero el segundo visionado ha resultado bochornoso ...menudo bochorno.
Salva el 5 la belleza de la imagen que a su vez queda desvirtuada por unos diálogos de un lirismo infame que podrían ser fácilmente superados por la redacción escolar de cualquier párvulo.
Pero lo que de verdad me mosquea es el tono tremendamente pretencioso, pedante, pseudo existencial , pseudo freudiano y pseudo posmoderno, y el apunte del pseudo pretende señalar lo vacuo de todo lo narrado verbalmente en la película, sólo salvable visualmente. Si fuese una película muda al modo de reportaje fotográfico bueno y va, hermosa siesta, pero francamente esos diálogos: "estar enamorada no es fácil, no basta con desearlo, hay que oirlo", "me llamo Otto mi nombre es capicúa"...ese sensualismo naif tan sumamente cerril, absurdo y ajeno a cualquier sensibilidad con un mínimo de profundidad. "Me gusta que te llames Otto", sería interesante someter el guión a una cura de humildad y de silencio, hay frases en esta película que tendrían un sentido siendo omitidas, sólo así cobrarían cierta verosimilitud, se desvirtúan en su propio lirismo justamente al ser pronunciadas.
La historia es un retrato de una familia desestructurada con una bella fotografía. Y sin embargo si se reflexiona sobre el asunto se palpa el maltrato sin piedad que Medem ejerce sobre la metáfora y la analogía, y aquí incurre en lo que ya mencionaba antes: hablar demasiado, o ser un charlatán. No es necesario que salgan aviones de papel y que el niño acabe siendo piloto, no es necesario, resulta tan insultante para la inteligencia del espectador que trasciende lo cursi y se convierte en vomitivo.
En cuanto a las actuaciones, al margen de las voces testimonio de una cuantiosa ingesta de antidepresivos, acordes con el tono azul de la cinta, he de decir que preferí bastante a Emma Suárez en La ardilla roja. Es paradógico ver como tantas pretensiones de "sensibilidad" y "profundidad" desembocan en una superficialidad tan grosera, tan falsa e inverosímil, tan sin sentido...
18 de abril de 2010
8 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Pretender someteder al espectador a 103 minutos de claustrofobia cinematográfica me parece una apuesta sumamente arriesgada y un experimento en todos los sentidos, pues al margen de la historia podríamos decir que esta premisa es ya una reflexión sobre en qué consiste el séptimo arte (tiene algo de encierro).

Los lectores de Cortázar no se sentirán defraudados : como aquel cuento cronopio en el que la familia construye un patíbulo, los personajes "se la pasan" DECONSTRUYENDO la casa. La tiran abajo. ¿Comedia dramática? ¿dRAMA CÓMICO? lo cierto es que se trata de la historia de un fracaso, aunque un fracaso querido como tal por los personajes. Tiene todos los puntos de ambivalencia que presenta un neurótico: el contenido psicoanalítico de la película es palmario.

Convertido en héroe familiar frente aun padre mediocre (putero, insignificante, poco carismático), Pablo se convierte en algo así como un Dios ausente, que literalmente se come a la familia. Digo se los come porque cuanto más "lo inflan" más se pudre el hogar- caja claustrofóbica. El tema de fondo juego-ficción realidad, y la hitoria de metamorfosis entre los dos hermanos están muy bien construidas.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Lo mejor: actuaciones de la madre, la abuela, los tres hermanos. El guión. La ambientación (un acierto el situar la historia en los años 50 a mi juicio). La fotografía. Sobre todo el hábil diálogo hacia la mitad de la película entre Patricia y Jorge sobre la verdadera/falsa ficción de la carta y el FINAL.

Lo peor: el personaje de Norma queda poco trabajado - sería interesante ver aún más el proceso por el cual pelea por convertirse en LA MADRE de la casa y además no queda claro el momento preciso en que ella se cree del todo su propia mentira-; el personaje de Patricia me parece ampliamente estático, si bien debería experimentar una completa metamorfosis a lo largo de la obra, la actriz me parece absolutamente plana. La escalera tiene bastante menor protagonismo del que debiera (digamos que pasa bastante desapercibida en una historia de ascenso y descenso social y generacional). La música un poco floja y creo que los flash back sobraban un poco, resultaban demasiado evidentes como "trucos narrativos" para no hacer demasiado pesado el encierro en la casa.
17 de abril de 2010 2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Gegen die Wand me parece fundamentalmente una película contra la autoridad, contra el poder y quizá más directamente contra el rígido modo de vida de la comunidad turca, bastante extensa en Alemania. La historia comieza con dos inadaptados sociales que rompen todas las normas: desde el protocolo usual en una relación de pareja (con un "cásate conmigo" casi a mano armada), pasando por todas sus adicciones y vicios. Fatih Akin sumerge en un mundo de lascivia y decadencia al que presenta como una autodestrucción de la que los dos personajes son cómplices. En principio sus "aficiones comunes" son bastante peculiares: esa insidiosa manía de cortarse las venas a la mínima de cambio ( escena clave aquélla en la que Cahit ejerce de instructor en su "arte") y su politoxicomanía. A mi juicio el director elige la vía de suicidio perfecta: no sólo porque enerve la templanza del espectador, sino porque se trata justamente de una ruptura con LA SANGRE. Sibel amenaza a Cahit con cortarse las venas si él no accede a liberarla de la sangre familiar. O lo haces tú o lo hago yo, en definitiva. Y lo que parece una manera un tanto esperpéntica y exagerada de independizarse se convierte en el tema de fondo de toda la película: una ruptura con la tradición, con los convencionalismos, un conflicto generacional. Una ruptura con el pasado.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Sobre todo Gegen die Wand es una reflexión sobre el amor y la naturaleza del matrimonio: la pareja en un principio anclada en un matrimonio "sincéramente hipócrita" (frente a los matrimonios turcos en la familia de Sibel, plenamente hipócritas) va evolucionando hasta convertirse en un "amor clásico", pero aquí podríamos decir, convencional porque sincero, o si se quiere occidentalizado. Una de las escenas más reveladoras a mi juicio de la película es aquella en la que Sibel charla con otras mujeres de su familia, mientras los hombres juegan en el cuarto de al lado. Ahí queda patente la superficialidad y convención de los emparejamientos en la tradición turca: los tipos engañan a sus mujeres en el burdel. Digo que es la más significativa porque constituye una manifestación de lo que los dos protagonistas se traen entre manos: su idilio aparentemente absurdo con amantes respectivos, comienza siendo una historia de amor similar a la que mantienen los integrantes de la familia de Sibel. Avanza utilizando algunas herramientas de ruptura social (cocaína a punta pala, amantes, juergas; es curioso el papel que juegan también los camareros en la película) hasta convertirse en un amor quizá más occidental podríamos decir (él en la cárcel, ella escribiéndole cartas). Sin embargo, a medida que transcurre la película esa rebeldía de los protagonistas corre peligro de culminar: sus pasos han acabado en TURQUÍA (el sitio del que querían huir).Parece que en las últimas escenas los jóvenes están a punto de sucumbir a la normativa social: a la idea de matrimonio en sentido usual, casados de nuevo con la tradición familiar (en la ciudad de la familia de él), con niña incluida. En ese sentido es un final altamente paradógico: ella se queda convertida en una buena mujer de familia, el tipo regresa a sus orígenes. Renuncian ambos al Deseo , deseo en todos los sentidos, pero ante todo deseo de no comulgar con aquello que les viene dado. Digo que es paradógico porque en cierto modo se mantiene un ápice de ruptura: hay algo que salvan del convencionalismo. Aunque claro sería perfectamente discutible hasta qué punto los "amores imposibles" no forman parte también de una convención. Más occidental quizá.

lo mejor: el suicidio vía venosa
lo peor: ciertas interpretaciones (la prima por ejemplo). Tampoco acabaron de convencerme los interludios musicales con el folclore turco . Anticipan demasiado el cambio de viento en la película.
19 de marzo de 2010 0 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
En la crítica a esta película creo habría que distinguir entre, por un lado, su funcionamiento o adaptación al género de películas al que pertenece, y por otro, el género en cuestión.
Como parte del género parece que funciona, es una comedia romántica, así, con mayúsculas; también sería interesante preguntar por qué el romanticismo es cómico, por qué es conciliable el amor y la comedia. Pero sobre todo, y ahí la segunda parte, creo que habría que plantearse por qué películas así son previsibles para el espectador, ¿qué las hace previsibles?. ¿No será que es justamente por su fuerza como creadora de estereotipos por lo que nos resultan previsibles?, ¿no será que han moldeado de tal forma el modo de vida de generaciones enteras que nada nos sorprende?, ¿se trata de un género hiperrealista, pero acerca de una realidad creada por el propio género?.
A mi juicio, lejos de infravalorar este tipo de películas como preferibles de dejar a un lado y mirar para otra parte (cuestiones técnicas al margen, pues claro que es perfectamente discutible la calidad de cada una de las películas integrantes del género), creo que habría que abordar de frente el problema (si se quiere ver como problema) : ¿por qué las comedias románticas? Desde luego lo que parece innegable es que tienen un peso ontológico, podríamos decir, moldeador de la realidad, mucho más fuerte que el western hoy en día. Parece.
Como punto interesante, me gustó la voz en off como telediario informativo; curioso el momento en que abandona ese recurso.
5 de julio de 2010
15 de 33 usuarios han encontrado esta crítica útil
La primera impresión al salir del cine fue una mezcla de aburrimiento y decepción. La sinopsis no prometía gran cosa, pero desde luego adelantaba un supuesto abordaje del conflicto postcolonial africano, tema por completo ausente o más bien secundario en la película.
Con total ausencia de diálogos- y pésima calidad de los que aparecieron- podría pensarse que las imágenes tendrían fuerza suficiente para narrar una historia. Pero no era el caso. Y ante una completa falta de argumento un podría aceptar las reglas de juego del cine independiente y esperar algo así como "mamar un concepto" o "aspirar una sensación" o "sentirse contagiado". Tampoco encontré nada así en la película: si de lo que se trataba era de reflejar la falta de control del blanco dominador - en este caso blanca- empecinado en continuar el ejercicio de su poder, amparado en el valor sentimental de la tradición que lleva a sus espaldas; si de lo que se trataba era de transmitir la ansiedad propia de un momento de crisis en el que el pasado heredado se tambalea, si en definitiva, era un retrato nihilista y decadente: ¿por qué África? Quiero decir , que si la película consiste en retratar una situación de "mujer al borde de un ataque de nervios", ¿hay realmente diferencia entre el "estado" de María en su Francia natal perdiendo el control ante cualquier amenaza cotidiana y esta sublevación de nativos que reivindican su autonomía? Parece claro que la película está contada en todo momento desde el lado de los colonos, pero siendo francos, la supuesta locura del hijo mayor- con unos tatuajes plenamente fuera de lugar , todo sea dicho-, los conflictos matrimoniales, el desenfreno de la protagonista con sus modelitos de safari en chalé africano resort, y ante todo el ensimismamiento de la cámara perdida a cada instante en objetos plenamente ad hoc y plenamente estériles simbólicamente...¿están en África? Si se trata de contar algo acerca del White material en un lugar extraño- y no como escenario exótico, safari recreativo- ¿no habrá que enfocar su conflicto con otra cultura extraña- conflicto ausente en la película? y sobre todo ¿qué es ese white material? ¿Un ensimismamiento megalómano? ¿Un sensualismo absurdo? ¿Una panorámica de decadencia y ausencia de sentido?
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