¿Alguien me explica cómo Juan José Ballesta puede entrar en un campamento romano (un hispano que no sabe hablar latìn) (obviemos por un instante el acentazo madrileño)? Y no contentos con eso, ¿cómo es posible que un campesino hispano, armado con un palo, pueda derrotar a todo un grupo de centuriones romanos entrenados exclusivamente para la batalla, los cuales están armados hasta los dientes?
Pues porque somos hispanos. Me parece que tras las penosas interpretaciones y el flojísimo guión se esconde toda una campaña patriótica al estilo U.S.A. Yes, we can hispanos.

Quizá sea una aguafiestas, pero tras la muerte de la chica, supe que había sido su amigo mudo el que la había matado. Y también supe que Sean Penn acabaría matando a Tim Robbins. Vamos, que en 5 minutos se acabó todo, salvo la magistral actuación de Robbins, que literlamente, se sale.
Para mi gusto, el Sr. Penn sobrevalorado y, lo siento por los fans de Eastwood, la película en sí también.