Emotiva sin ser cursi, divertida a la vez que profunda, nostálgica pero optimista… A estas alturas, no es que espere demasiado del llamado “cine familiar”, pero es que “Salta” es eso y mucho más. Una pequeña gran joya dentro del actual panorama cinematográfico español.

Maravilloso debut de la realizadora Olga Osorio, que convierte en aparentemente fácil algo tan complicado como dirigir a niños (qué decir de Mario Santos, quien brilla con luz propia) o hacer ciencia-ficción sencilla, divertida y, sobre todo, sin complejos. Por otro lado, además del gran trabajo actoral, con unos fantásticos Tamar Novas y Marta Nieto a la cabeza, tanto la dirección de arte como la banda sonora le dan también su plus de calidad.

No se confundan: puede parecer una película amable para un rato de entretenimiento (lo cual no es negativo en absoluto), pero “Salta” logra algo más duradero. Te toca el corazón tengas los años que tengas y ahí se queda.