De Palomares, la inmensa mayoría, lo único que sabemos es que Fraga fue a darse a un baño en una playa para demostrar que ahí no pasaba nada. La gente poco más sabe de ese baño tan mediático, para la época y para la historia de España.

En Palomares, el documental, ese baño es solo un detalle de una historia que es una vergüenza para España y Estados Unidos. Una chapuza de grandes dimensiones que se convirtió en una catástrofe humana y natural que aún hoy, más de medio siglo después, sigue permaneciendo en la tierra y los cuerpos de unas personas a las que siempre se les prometió una solución que nunca llega.

Una de las personas que hay detrás de este documental, digno de mención, es David Beriain, asesinado en Burkina Faso por practicar un periodismo que está en serio peligro de extinción. Este documental es una muestra de su trabajo.

Si te interesa la historia de España tienes que ver Palomares, si solo te vas a poner un rato el primer capítulo, por curiosidad, ya te quedarás para verlo completo. Hay entrevistas, imágenes de archivo, documentos inéditos y testimonios que merecen mucho la pena.

Venga, a disfrutar.

DJM

Es una de esas películas que te hacen pensar, después de haberla visto, gracias a la intensidad de sus diálogos, que son muy profundos. Eso sí, esto también es un arma de doble filo, porque hay momentos en los que la trama puede resultar bastante tediosa, porque apenas hay acción, salvo la bonita relación que se crea entre ellos y que avanza lentamente.

Me escama un poco que dos personas tan jóvenes, como los protas, lleguen a ese gran nivel de conversación. Al mismo tiempo da esperanzas de que, probablemente, todos los jóvenes veinteañeros, o incluso de menos edad, no sean bots anclados a teléfonos móviles cuya única preocupación es conseguir likes en redes sociales.

Y una vez dicho esto, casi que me estoy autoconvenciendo para subirle un poquito la nota, por lo que le doy un 6,5.

Me lo pasé pipa en el cine viendo 'El buen patrón'. Evidentemente, tener a todo un Javier Bardem al frente del reparto es una motivación extra para ver la peli. Él no defrauda, claro está, pero es que la historia que ha montado Fernando León de Aranoa es una maravilla.

Con situaciones bastante cotidianas, metiendo algunos clichés (que en este caso funcionan todos muy bien) y mezclando tramas de personajes muy bien construidos, la película se te pasa volando. Cuando la estás viendo, tienes esa sensación tan gustosa de no querer que se acabe.

Es una película de películas, pues todo personaje suma y cada una de sus historias aporta, y mucho, al éxito de la que ya es la película más nominada en la historia de los Goya, con 20 candidaturas. ¡Ahí es nada!

Si no has ido a verla, ya estás tardando. Te entrarán las prisas cuando la colmen de Premios Goya.

DJM