Como el título de la canción de Los Secretos. Así estaba yo disfrutando de esta película... y es que los que ya pasamos de los 40 y crecimos con nuestras yumas, pantalones vaqueros de tergal y camisetas Ferrys, mientras pasábamos el tiempo jugando a la peonza, las canicas o leyendo cómics de Mortadelo y Filemón volveremos a tener 12 años durante hora y media.
Y es que la película es tan fiel a los cómics del señor Ibáñez, que no deja de ser un cómic animado, donde los dos intrépidos agentes de la Tía vivirán una aventura digna de esas de 44 páginas de la editorial Bruguera (aún tengo algún ejemplar de éstos de 60 ptas) o Ediciones B, llena de humor, despropósitos, confusiones (con el maravilloso Rompetechos) y golpes, muchos golpes del sufrido Filemón.
En fin, sólo decir:
Gracias señor Javier Fesser por hacerme rejuvenecer 30 años durante hora y media.
Y gracias señor Ibáñez, por tantos buenos momentos que formarán parte de mi para toda mi vida.

Sorprendente, simplemente sorprendente. Si bien la violencia está presente, Tarantino no comete los excesos de películas posteriores (véase las dos partes de Kill Bill), y ésta se manifiesta en su justa medida, tal y como la historia lo requiere. Los actores están genial, en especial Travolta, felizmente recuperado en esta película. Y que decir de la banda sonora, un magnífico puñado de buenas canciones.
spoiler:

Esa es la pregunta que todavía me hago, y por diferentes motivos: historia sin sentido, escenas de acción de risa, violencia injustificada, cantantes metidos a "actores"... Es cierto que sus predecesoras no invitaban al optimismo, pero el resultado de ésta supera con creces (en malo) a las anteriores. Basta decir que ni un actor de la talla de Johny Depp se salva del desbarajuste. En fin, una hora y media perdida.