Esta película la descubrí por casualidad y me sorprendió gratamente, sabe mezclar excelentemente el misterio con el drama. El personaje de George Scott es magnífico y te transmite muchos sentimientos pero lo grande de esta película es que a pesar de ser de 1980 provoca mucho mas horror que la mayoría de las películas de terror actuales que cuentan con los efectos especiales modernos. Desafortunadamente el talento de su director Peter Medak nunca se repitió ya que dirigiría un sin fin de bodrios el resto de su carrera. Sin duda recomiendo esta película a los amantes de las películas de terror; en específico sobre casas embrujadas, les aseguro que no se arrepentirán.

Hace tiempo quería ver esta película porque goza de mucha fama dentro del cine de terror, finalmente la conseguí y puedo decir que no me decepcionó aunque reconozco que tiene muchos fallos. Los efectos especiales y los dialogos son bastante cutres; aunque se puede justificar por estar hablando de 1977, el guión tiene muchísimos huecos e incoherencias y al terminar de ver la películas se queda el espectador con muchas dudas. Sin embargo digo que no me decepcionó porque el fin de una película de este género es sacar uno que otro sustillo y provocar un ambiente tétrico y esta película lo consigue, insisto no es una obra maestra pero cumple su cometido.