Una psicópata despreciable (cuenta haber matado a un pobre guardia de seguridad, y no parece tener el mínimo remordimiento) narra en voz en off (típica voz en off tediosísima) las aventuras de una panda de imbéciles cuya ambición es conseguir mucho dinero fácilmente. La serie es una interminable sucesión de clichés sobre el género, una amalgama cutre de pastillitas visuales .Mención especial a las insoportables secuencias de montaje, que se llevan la palma de lo aburrido. Un fórmula que, por alguna razón, siempre funciona. Los actores no lo hacen mal, pobrecitos. Para traperos descerebrados puede ser interesante. Al resto no se la recomiendo.

Gente pervertida haciendo cosas pervertidas y muy explícitas hasta la náusea, verdaderamente. Todo un ejemplo de cretinismo profundo, para colmo con ínfulas intelectuales. Cualquier basura de Pornhub es mil veces menos pornográfica que esta mierda, y mil veces más cine. Es la provocación porque sí, cosa muy de moda entre los submentales como Tontolini. Jamás entenderé el gusto por la violencia torturadora y criminal, sólo un perturbado mental disfrutaría viendo esto. Aparte de lo dicho, es una película vacía. Los fascistas eran sádicos, ¡qué sesuda reflexión! El Ser Humano se adocena cuando pertenece a grupos, ¡qué idea nueva y fascinante! ¡Que verdad descubierta y revelada! Para tontos muy tontos, y para psicópatas muy psicópatas.