Es la típica película simpática que te alegra la tarde de un domingo. James Belushi hace "su papel" el de tio simpático al que le ocurren cosas raras y al final todo termina bien.

No es una obra maestra, pero siempre que la veo me deja con una sonrisa y con ganas de ver a los Cavs.

Grandiosa película sobre la época de los inventores y de cómo no siempre salen las cosas como uno quiere.

Es de esas películas que te emocionan con cada cambio en la trama y que te coloca en la piel del personaje.

La verdad es que fue uno de los últimos cartuchos que le dedico al cine español,y como tal, no me ha decepcionado en mis planteamientos, una película bastante previsible, con una cámara en constante movimiento que genera mareos continuos.

La interpretación es bastante penosa e incluso los guionistas tuvieron la brillante idea del jadeo inicial, cosa que no debe faltar en el cine español.

Se queda muy lejos de películas como Las Colinas tienen ojos, por poner un simil en la trama.

En definitiva una muy mala manera de gastarse 6 euros.