Dicen los sabios de la vida que cuando algo te deja pensativo, horas después de vivirlo, como mínimo merece la pena darle el merito de eso. Después de ver Pobres criaturas será imposible quedarte inmune a su efecto. O la amas, o la odias.

La sinopsis de este Frankenstein versión feminista gira en torno a las experiencias que la vida propone a un cerebro de un bebé implantado dentro del craneo de su madre. ¿Tema retorcido verdad? Pues la película reflecta a la perfección ese retorcimiento.

Los niños lloran, ríen, juegan con la vida, escupen la comida, contestan mal, hablan sin complejos y un fin de otras cosas generalmente graciosas. Eso no lo vi en absoluto en la actuación de Emma Stone. Sólo vi un especie de zombie pseudohumano con un serio problema de psiquiatría del orden más elevado. La interpretación de la señora Stone me pareció un ensayo malo (no... lo siguiente) que quizás solo buscaba ridiculizar la inocencia y la falta de madurez global de la infancia.

Es evidente que uno de los mensajes más potentes que quiere transmitir la película gira en torno a la libertad de la mujer. Ambientada en plena época del art nuveau, vemos como una la inocencia infantil de la protagonista la hace inmune a la supresión social que sufrían las mujeres en esa época. Por eso la reivindicación de la libertad global para la mujer, expresión, laboral, llegar a ser dueña de su vida y de su cuerpo.... todo bien y loable verdad? No tanto...

Se que es difícil encontrar el equilibrio en la vida. Yo nunca lo consigo. Pero lo de "llegar a ser dueña de su cuerpo" en esta película se ha llevado al extremo más innecesario que sobrepasa el límite medianamente aceptable en una película que no busca activamente ser catalogada como "erotica". Veo de mal gusto que el supuesto cerebro infantil aprende a "ser dueña de su cuerpo" inclusive antes de aprender a hablar. Veo de mal gusto exponer tanto el cuerpo de todos sin dejar absolutamente nada al maravilloso mundo de la imaginación de cada uno. Y lo que es peor, es que ninguna mujer se va a sentir sexualmente identificada con la libertad sexual que se supone que busca la protagonista. No pasa nada con llamar las cosas con su propio nombre. Pues eso. Pobres Criaturas es una película muy erotica. Y eso no sale ni en el trailer, ni en la "apta para mayores de 16 años".

Visualmente impactante jugando entre el blanco y negro y unos colores abrumadores, algo que se ve en el trailer... pero lamentablemente en ningún momento ha conseguido engañarme para no parecer demasiado evidente que todo era una puesta en escena. Películas como Moulin Rouge de hace mil años hace una labor infinitamente mejor acabada. Una banda sonora como en general la película... rara y retorcida. Vestuario maravilloso, diría que guión muy interesante qué deja uno con ganas de volver a verla solo para apreciar eso y apuntarlo todo en su cuaderno de frases inteligentes.

Con que mensaje nos quedamos. Eliminando la excesiva basura erotica que sobra, vemos un cuento que puede resultar inclusive familiar. La historia del hijo pródigo, la libertad de elegir entre el bien y el mal... evidentemente elegir siempre el mal y aprender del error para volver al bien y a la vez sentirse agradecido por haber tenido la libertad de errar.