Gran película que no nos da apenas ningún respiro y saca provecho cada minuto de la cinta.

Esta continuación deja de lado el estupendo "pseudo terror" de su precuela para a cambio darnos acción y maldad a partes iguales.
Sobre todo maldad, aquí la niña protagonista es la única que se salva de tener un corazón podrido.
El "ciego" (no tiene otro nombre) es un protagonista antiheroe y el villano antagonista también tiene algo de "antivillano", pues ambos convergen al recorrer un oscuro camino de barbarie y maldad impulsados por un retorcido sentimiento de amor.

Es una película violenta y sangrienta, pero sin recurrir al mal gusto, así que nada impide disfrutarla visualmente, más aún gracias a alguna que otra genialidad con la fotografía.
Sí, hay algunas situaciones poco creíbles, algún que otro diálogo mejorable....pero oigan, esto es cine de acción.

A mí me ha gustado más de lo que esperaba. Ahora bien, como dije al principio, el terror ha desaparecido por completo, lo cuál le hace perder la originalidad y frescura de la precuela.
Quien la visualice esperando esos mismos ingredientes de la primera parte, se puede llevar un chasco, lo cuál supongo explica las bajas notas de muchas de las críticas.

Lástima, la película no tiene ritmo, no tiene emoción. Muchos personajes, muchos sucesos, mucho hilos que atar...., y no es que sea complicado atarlos. Lo que pasa es que la película es tediosa, como si ella misma careciese de interés en relatarse...
Pues si ella no pone interés, el espectador aún menos.

Le doy un 6, porque tampoco es un desastre y con algo de esfuerzo por nuestra parte, pues se puede llegar disfrutar a ratos.
Pero no es entretenida, ni apasionante, ni misteriosa.

Cuando se descubre quien es el topo, la verdad es que nos da igual y solo queda celebrar que ya se termine la función.

Quizás lo que a Le Carre le funciona con tinta y papel, no puede funcionar en celuloide.

El guion es una propuesta atrevida y mejor traída de lo que cabría esperar. Por su propia inverosimilitud, no es fácil hacer de esto una historia sin abandonar toda coherencia y/o recurrir al humor "tontuno".
Sin embargo, creo que se consigue resolver más que satisfactoriamente.

No es una gran película. Al principio engancha simplemente porque quieres ver hasta donde conduce este desvarío, pero luego atrapa por resultar emotivo la lucha del protagonista intentando arreglar los errores cometidos en su vida, buscando soluciones en la otra realidad.

..pero lo que da..., es suficiente.

Vin Diesel hace un trabajo estupendo, demostrando que puede hacer papeles en los que no tenga ser un "matón".
De hecho, brilla mucho más que cuando hace de musculitos.

La película en sí es entretenida, entrañable y medianamente divertida. Pero se hace larga y por desgracia desde el primer momento ya sabemos que no hay ninguna sorpresa escondida, ni van a haber giros de guion y no hay nada esperando a ser desvelado durante el desenlace.

Es un macrojuicio a un par de familias mafiosas al completo, donde el protagonista va por libre en cuanto a su defensa, así que sus alegatos campechanos despertaran la simpatía del jurado a la par que la desesperación de la fiscalía por la falta de seriedad en un juicio histórico y también despertarán las reticencias del resto de acusados que temen verse perjudicados por los dislates del protagonista.

Insisto, es una historia prometedora, que luego no da tanto jugo como cabría esperar.
Pero no deja de ser una película recomendable. Que nadie dude en verla y disfrutarla.

Estamos ante una cinta de terror, que no da terror, porque no está pensada para dar terror.

Aquí el terror es básicamente un formato para las historias, pero no tanto el propósito. No son historias para tomárselas en serio, ni siquiera lo pretenden. De hecho, hay alguna que otra escena diseñada para ser explícitamente cómica.

Son buenos argumentos, que quizás funcionarían mejor en las viñetas de alguna revista de comic underground de los años 70-80 con Mickey Rourke haciendo de anfitrión siniestro.
Si visionamos la película con estas expectativas, la disfrutaremos.

Si la vemos buscando una gran obra cinematográfica del terror, obviamente nos llevaremos un chasco.