La película abre con el inicio de una joven inocente llamada Mary, apodada como Ratita, que ingresa en un internado exclusivamente para chicas. Enseguida se integra al ambiente junto con sus dos compañeras de habitación, Paulie y Tory.

A medida que van pasando los minutos de la cinta, nos muestra la historia de sus dos compañeras y la relación que tienen entre ellas. Se va mostrando sus diferentes vidas y la relación emocional que las unen a raíz de la crianza de sus diferentes hogares.

Al principio, el plano enfoca más desde el punto de vista de la protagonista ante todo lo que le rodea y sobre todo de la relación íntima de sus compañeras. Sin embargo, ese enfoque se va dispersando durante el largometraje perdiendo el contacto hasta en los últimos minutos del final que vuelve a retomarlo.

Por unánime mayoría, Piper Perabo destaca por su gran interpretación y protagonismo, mostrándonos una gran sensibilidad que va transmitiendo todo el abanico de emociones que puede gestionar una adolescente cuando siente el amor. Sus compañeras podían haber destacado más, si se hubiera profundizado más en sus historias.

La historia es sencilla y a la vez compleja. Es un reto por parte de la directora, anhelar la libertad de amar sin tener un precio por el que pagar.

Diría que es un spin off del Equipo A, pero en versión cutre. Debo reconocer que es una película pésima y en la que no se sabe si reír o llorar por lo mala que es o porque te hace gracia en algunas escenas de la trama.
Admito que me topé con esta película por Katie McGrath y la verdad es que su actuación me ha dejado fría. Todos admitimos que es guapa y da buena imagen, pero a nivel de interpretación, se podía aprovechar más de su personaje. El único que ha tenido más "papel" ha sido el maravilloso hacker, interpretado por Sam Huntington.
Resumiendo esta crítica, se trata de una película para verla un domingo aburrido con mantas y palomitas.

Película pasable. En general, no me ha gustado mucho, pero debo admitir que hay ciertos momentos con cierta chispa y sentido de humor pero no llega a convencerme del todo.
La historia, como se puede ver, es sencilla, basada en tres hilos diferentes que se desarrollan dentro de cada miembro de la familia Petunia y sin complicarse, lo cual, se agradece. Quizás lo malo es la historia, que le falta algo o no me transmite del todo. Debo reconocer que me ha encantado el personaje principal, Charlie, interpretado por Tobias Segal y su historia. Por supuesto, también debo alabar a Brittany Snow, que me ha gustado también su personaje y su implicación en la historia. Os recomendaría verla solamente a aquellos que le gusten las historias familiares con toques dramáticos o que deseen pasar una tarde de domingo.

Cora (Brittany Snow), una joven con un pasado conflictivo, trabaja como operadora en una oración Call Center bajo el mandato de Bill, su líder religioso. Un día, Cora comete un error en una llamada que se va a desencadenar en una serie de consecuencias que van a influir totalmente en su vida: La aparición de un desconocido (Tom Lipinski), arrepentimiento de su pasado o los conflictos sobre su propia fe. Una película simple y a la vez compleja.

Tengo sentimientos de confusión y a la vez de admiración por la interpretación de Brittany Snow, que viendo su filmografía, creo sinceramente que esta es una de sus mejores películas. Se ve su madurez a la hora de meterse en la piel de la protagonista problemática y deprimida. En cuanto a la historia, no está nada mal pero me ha dejado un poco fría. Está muy bien tener una historia de dudas y cuestiones sobre la fe y en que debemos creer o no, pero no me ha convencido mucho el argumento. Quizás le falta la chispa.

Película candidata de Antena 3 para los fines de semana con el fin de dormir en el sofá. Una película en la que estos americanos celebran su graduación del instituto en un hotel lujoso. Qué cosas. Esto no pasa en la vida real. Volviendo a la trama de la película, se puede ver claramente que es sencilla y todo es previsible. No hay giros ni nada que pueda sorprender al público. Es aburrida, porque el psicópata que está obsesionado con la joven protagonista solo sabe marear la perdiz durante toda la película para tener un final muy previsible.

Lo único " aceptable" es el principio, que ha comenzado con buena chicha pero luego ha ido perdiendo totalmente hasta el final. Entonces...¿Lo mejor de la película? Brittany Snow. Solo su belleza se salva. El resto será mejor que lo vean ustedes si quieren reír esta fabulosa comedia.