Otra película en la que nos muestran la lucha contra uno mismo, el espíritu de superación, pero solo eso. Nada más. Está muy bien que nos digan que es una historia real, pero eso no la hace más interesante, más buena.
Aburre, es superficial, no ahonda en los sentimientos de los personajes principales, su relación. Tampoco habla del aspecto mental de una desafío tan brutal como este.
Por último, una poco creíble Annette Bening en el papel de la nadadora, en cuanto a su físico. Más creíble hubiera sido que hubiese interpretado el papel de la nadadora, Jodie Foster, de físico mucho más atlético.
En fin, que los americanos nos cuelan una y otra vez la misma película, y nosotros tragamos. ¿Hasta cuando?

Seguimos con la moda oriental.
Todo vale si se sale de lo convencional, aunque sea un tostón insoportable. Me recuerda a la época de las películas de arte y ensayo. Parecía obligado tener que aguantarlas y que te gustaran, si no no estabas en el "rollo". Ahora la historia se repite con algunas de las películas que nos vienen de oriente.
No hay terror, no hay ritmo, no hay historia. Películas vacías, un envoltorio sin contenido. Queda muy bien decir que son geniales, pero....
No es este el camino.

Se me hace difícil hacer esta crítica, solo se me ocurren dos palabras: Obra maestra.
Sí que es cierto que escribo estas líneas poco después de haber disfrutado de la película, pero, no sé, creo que con el tiempo la sensación de haber visto uno de los mejores dramas de la historia del cine se me irá incrementando.

La historia, los personajes, todo se hilvana como la mejor de las telarañas para atraparte desde el minuto uno y soltarte, agotado y feliz al final del film.

Memorable.

El cine americano se come grandes películas como ésta. Guión original, buena interpretación. El ritmo, como el interés no decae en nigún momento.
Porqué seguimos viendo las mismas películas una y otra vez. Vale la pena dar un salto al vacío y degustar platos como el que nos ofrece en esa ocasión el cine brasileño.
No lo dudéis y disfrutar, sienta bien y no produce acidez. Buena cocina de autor!.

Película de serie B que pretende imitar los gags y giros de guion que dieron fama a los hermanos Coen. La película se hace pesada, presumible en todo momento, sin gracia.

En mi opinión, mejor no perder el tiempo, mejor volver a ver por enésima vez: El Gran Lebowsky, Sangre Fácil, Arizona baby, etc. etc. Ahora ya sabemos cual es el bueno de los dos hermanos Coen. Yo le diría a Ethan que vuelva con su hermano. Que lejos está esta película de sus grandes films. Fan de ellos desde Sangre Fácil, aunque con alguna que otra decepción, nada comparado con esta película.