Antes que nada quiero aclarar que, en una conferencia de prensa Armando Bo, que debuta con este último Elvis, explicó que los encargados de sonido e imagen ya tenían experiencias previas, no eran novatos.

Como muchos de por acá, coincido en la sorpresa de que esta película tenga tan buenas críticas.

La realidad es que el personaje principal canta excelente, y la fotografía de la película es, por lo menos, buena.

El inconveniente ocurre en la historia, no sabemos bien hacia dónde va, aunque hay muchas películas aparentemente sin rumbo (se me ocurre Spun, por ejemplo) pero que pueden dejarte alguna sensación en el cuerpo cuando empiezan a correr los títulos, apelando al desenlace de la historia. Hubiera sido un buen golpe dar algún atisbo de por qué este tipo se cree Elvis, y de quién era antes. Pero no, el guión de este film tiene baches larguísimos, los silencios ocupan gran parte del largometraje, y hay muchas cosas presupuestas.

Es un 6, porque realmente se ven lindas imágenes, y la música deleita. El resto, a mejorar.

A simple vista parece una comedia norteamericana corriente. Bueno, tiene mucho de eso, pero va un poco más allá.

El trasfondo de los protagonistas es la emergencia desde la adversidad. La fraternidad es una salida a los conflictos personales de cada personaje, incluso de los secundarios.

Desde el comienzo del filme se desarrolla cómo cada uno vive el sueño americano, esposa, hijos, trabajo en orden o exitoso. Y en pocos minutos se tira todo eso por la borda.

Y es ese el gran componente de esta película, que la verdad irrebatible, aun pintada de comedia, es que hay que seguir, y que los nuevos proyectos distraen de las frustraciones.

El elenco está formado por conocidos del género, muy efectivos en su papel.

Dos cosas para señalar: muy buena musicalización, y grandioso Will Ferrell.

La película transcurre en un mundo lleno de monotonía, drogas, sexo y un constante accionar errático. Sólo en el final la película alcanza el choque con su mensaje. Expongo en spoiler:

La película es más que entretenida, pierde la dinámica al momento de incluir varios personajes hacia la mitad de la película, camino que se despeja con el correr del film.

Lo único, al menos por ahora en esta primera vista que le di a esta obra, es la imagen que muestran de Villa Gesell, ciudad de Argentina, que aparece como un paraíso montañoso rodeado de lagos, cuando en realidad es una ciudad costera, cuyo relieve más alto son las dunas, que no exceden los 10 metros. Por lo demás, más que aceptable.