You must be a loged user to know your affinity with Friman
Críticas ordenadas por utilidad
Movie added to list
Movie removed from list
An error occurred

2,0
4.774
1
11 de diciembre de 2006
11 de diciembre de 2006
13 de 15 usuarios han encontrado esta crítica útil
House of the Deade te mantiene atado a la butaca desde el primer segundo hasta el último. Carcajada tras carcajada, puedes ver pasar un "argumento" delirante por lo surrealista. Las pretensiones de seriedad de la película hacen que resulte grotesca. Se puede resumir el argumento del siguiente modo:
Unos tíos van a una fiesta en una isla llamada "Isla de la Muerte". Se asombrar al ver que en la "Isla de la muerte" hay muertos vivientes que matan a la gente. Después pasan cosas por aquí y por allá, sin ninguna lógica especial. Carreras por un bosque, tías en pelota, pistolas con cargadores de tres mil millones de balas, escenas que parodian sin buscarlo el efecto "bullet-time" de una película cuyo nombre no debe ser mencionado al lado de esta...
Para enmarcar, los pantallazos del videojuego que la película intercala de cuando en cuando.
Imprescindible verla con unos amigos y palomitas al lado. Reírse solo de la estupidez ajena no es tan divertido.
Unos tíos van a una fiesta en una isla llamada "Isla de la Muerte". Se asombrar al ver que en la "Isla de la muerte" hay muertos vivientes que matan a la gente. Después pasan cosas por aquí y por allá, sin ninguna lógica especial. Carreras por un bosque, tías en pelota, pistolas con cargadores de tres mil millones de balas, escenas que parodian sin buscarlo el efecto "bullet-time" de una película cuyo nombre no debe ser mencionado al lado de esta...
Para enmarcar, los pantallazos del videojuego que la película intercala de cuando en cuando.
Imprescindible verla con unos amigos y palomitas al lado. Reírse solo de la estupidez ajena no es tan divertido.

4,4
1.569
2
23 de octubre de 2024
23 de octubre de 2024
13 de 16 usuarios han encontrado esta crítica útil
Strike 1: el casting de la película es horrendo. Jean Reno tiene 76 años, y su "hijo", Franck Duboscq, tiene 60. Parecen más hermanos que padre e hijo. El disparate no acaba aquí: Suzanne Clément tiene 55 años y es la mujer de Franck Duboscq, con la cual tiene una pequeña que rondará los... ¿10 años? Familia muy multicultural y moderna, eso sí, que nos lleva al siguiente disparate.
Strike 2: la película nos toma por idiotas y refleja una Edad Media en la que, por una parte, todo el mundo va depilado, tiene unos dientes impecables y una higiene envidiable (es fantasía y comedia, de acuerdo), pero por otra parte, todos los clichés estúpidos de la Edad Media que los historiadores se esfuerzan por desmontar hacen acto de presencia (sí, niños, en la Edad Media la gente sabía que las personas negras existen, había mujeres que podían leer y escribir, y desde luego los abogados ejercían su profesión). La fantasía es inconsistente consigo misma y con el juego: los poderes de los personajes son una parida enorme en algunos casos y desde luego, nadie en su sano juicio monta una partida con un narrador y 5 personajes.
Strike 3: ya existía una magnífica película sobre Los Hombres Lobo de Castronegro. La rodó John Carpenter en 1982 y se titula La Cosa. El juego de mesa es un juego sobre paranoia, engaño, terror y supervivencia. Adaptarlo en forma de comedia es ser un idiota absoluto, pero que además sea una comedia sin gracia, sencillamente no tiene perdón de Dios.
Strike 2: la película nos toma por idiotas y refleja una Edad Media en la que, por una parte, todo el mundo va depilado, tiene unos dientes impecables y una higiene envidiable (es fantasía y comedia, de acuerdo), pero por otra parte, todos los clichés estúpidos de la Edad Media que los historiadores se esfuerzan por desmontar hacen acto de presencia (sí, niños, en la Edad Media la gente sabía que las personas negras existen, había mujeres que podían leer y escribir, y desde luego los abogados ejercían su profesión). La fantasía es inconsistente consigo misma y con el juego: los poderes de los personajes son una parida enorme en algunos casos y desde luego, nadie en su sano juicio monta una partida con un narrador y 5 personajes.
Strike 3: ya existía una magnífica película sobre Los Hombres Lobo de Castronegro. La rodó John Carpenter en 1982 y se titula La Cosa. El juego de mesa es un juego sobre paranoia, engaño, terror y supervivencia. Adaptarlo en forma de comedia es ser un idiota absoluto, pero que además sea una comedia sin gracia, sencillamente no tiene perdón de Dios.

3,9
13.906
1
13 de diciembre de 2006
13 de diciembre de 2006
20 de 37 usuarios han encontrado esta crítica útil
Repugnante engendro pseudo-cinematográfico, es una forma tibia de calificar a "Mortal Kombat". Basada en uno de los dos grandes mitos de los videojuegos de lucha de los 90, la cinta se puede resumir así: unos monos con disfraz hacen el lelo por aquí y por allá.
Ni siquiera se respeta la mínima historia que subyace en el videojuego (Sub-Zero y Scorpion coleguitas, sí...). Ni guión, ni efectos especiales, ni luchas espectaculares, ni música (eso que suena no es "música"), ni... ni nada parecido a una película. No veo puntos a favor para conceder más de un 1. Lástima que no exista el cero.
Anécdota: al igual que la gran mayoría del público en el cine, me levanté de mi butaca antes de la mitad de la película, y me introduje silenciosamente a otra sala para no ver tirado el dinero de la entrada.
A quién se la recomiendo: a niños menores de 8 años, y a todos los que tengan un gran sentido del humor.
A quién no se lo recomiendo: a amantes del cine de calidad (mínimo exigible: Spice World), y a niños de más 8 años.
Lo mejor: cuando el Christopher Lambert aparece de abuelete místico y te dan ganas de reír por no llorar. Estaba mejor en papeles de películas de serie B con Mario Van Peebles.
Lo peor: que el director sigue rodando bazofias como ésta y no le ha pillado por banda una jauría de espectadores furiosos dispuestos a lincharlo.
Ni siquiera se respeta la mínima historia que subyace en el videojuego (Sub-Zero y Scorpion coleguitas, sí...). Ni guión, ni efectos especiales, ni luchas espectaculares, ni música (eso que suena no es "música"), ni... ni nada parecido a una película. No veo puntos a favor para conceder más de un 1. Lástima que no exista el cero.
Anécdota: al igual que la gran mayoría del público en el cine, me levanté de mi butaca antes de la mitad de la película, y me introduje silenciosamente a otra sala para no ver tirado el dinero de la entrada.
A quién se la recomiendo: a niños menores de 8 años, y a todos los que tengan un gran sentido del humor.
A quién no se lo recomiendo: a amantes del cine de calidad (mínimo exigible: Spice World), y a niños de más 8 años.
Lo mejor: cuando el Christopher Lambert aparece de abuelete místico y te dan ganas de reír por no llorar. Estaba mejor en papeles de películas de serie B con Mario Van Peebles.
Lo peor: que el director sigue rodando bazofias como ésta y no le ha pillado por banda una jauría de espectadores furiosos dispuestos a lincharlo.
28 de julio de 2009
28 de julio de 2009
10 de 19 usuarios han encontrado esta crítica útil
Vaya por delante: no he leído ni un libro de Harry Potter, así que valoraré la peli en sí. Los hiper-mega-fans a ultranza de la peli, podéis absteneros ya de seguir leyendo e irle dando directamente al botón de "No" (¿me ha resultado útil esta crítica y/o sé reconocer una buena película?).
Avisaos estáis.
Al no caber todo en "Spoiler", arranco aquí con el resumen:
De qué va la peli: pues de forma muy sutil, me pareció intuir que las hormonas de los chavales por fin alcanzan su apogeo y la libido se dispara en Hogwarts. Pero todo tratado con mucho tacto y delicadeza. Así vemos que a Hermione le gusta Ron (creo, porque sólo lo insinúan en media ocasión en toda la película). Pero por desgracia a Ron no le gusta Hermión, antes le va el cepillarse todo lo que se mueva.
Después tenemos que a Harry (me pareció intuirlo) le mola Ginny. Lástima que la pelirroja esté enrollada con otro. Que eso destroza a Harry, quien lo dice muy sutilmente:
- Asín me siento yo, ¿ves? Jodido como tú, Hermione, llorando como una perra, como estás ahora mismo...
Ron, con mucho tacto él, tras estar tanto tiempo a pan y agua, procura darle al tema con la Cheerleader esté Hermione delante o no:
- Que hasta estoy escocido, macho, mira, mira.
- Ehh, no, si yo te creo, súbete los pantalones, anda.
Algo así es lo que le dice a Harry en el tren. No sé, si yo fuera Harry quizás me plantería dormir en otra habitación, sólo por si acaso.
Pero claro, para los nuevos espectadores, que se perdieron antes joyas del 7º arte como La Orden del Fénix (no recuerdo qué sucedió en toda la peli, así de intensa fue), hay que aclarar todo, no vayan a pensar lo que no es:
Dumbledore, que es gay (y este es probablemente el único dato serio de esta crítica), se interesa misteriosamente por la vida privada de Harry:
- Y, ejem... dime, Harry... ¿esa rubita con la que vas por ahí?, Esto...
- Ah, no, señor, o sea, es mi amiga y tal...
- ¿Follamiga?
- ¿Cómo? Ah, no, qué va, amiga a secas...
- Entiendo. Eso quiere decir que...
- Señor, temo decepcionarle, pero eso que está tocando es mi varita mágica, que la llevo en el bolsillo, y me gustaría irme ya.
- ¡Harry, una vez más, debo pedirte demasiado!
- Ehhh... sí, claaaro, el caso es que... ¡tengo clase ahora! ¿Este año el profesor de defensa de las artes oscuras no es un desconocido, lacayo de Voldemort?
- No; este año no. Visto lo visto, hemos decidido poner a alguien de confianza.
- Pues no se ofenda, pero ya iba siendo hora, porque jooooder...
Y llegamos así a uno de los puntos fuertes del film: por una vez una vez el nuevo profesor de defensa contra las artes oscuras NO es el malo de la peli. ¿No sé, no se mosquean un poco? Quiero decir, ¿no deberían estar atentos con quién contratan cada año, y eso? Mirar el currículum antes o una encuesta, como en EEUU:
¿Soy un esbirro encubierto de Lord Voldemort y tengo la intención de destruir a Hogwarts/Dumbledor/Harry Potter/la civilización tal y como la conocemos?
S/N
Avisaos estáis.
Al no caber todo en "Spoiler", arranco aquí con el resumen:
De qué va la peli: pues de forma muy sutil, me pareció intuir que las hormonas de los chavales por fin alcanzan su apogeo y la libido se dispara en Hogwarts. Pero todo tratado con mucho tacto y delicadeza. Así vemos que a Hermione le gusta Ron (creo, porque sólo lo insinúan en media ocasión en toda la película). Pero por desgracia a Ron no le gusta Hermión, antes le va el cepillarse todo lo que se mueva.
Después tenemos que a Harry (me pareció intuirlo) le mola Ginny. Lástima que la pelirroja esté enrollada con otro. Que eso destroza a Harry, quien lo dice muy sutilmente:
- Asín me siento yo, ¿ves? Jodido como tú, Hermione, llorando como una perra, como estás ahora mismo...
Ron, con mucho tacto él, tras estar tanto tiempo a pan y agua, procura darle al tema con la Cheerleader esté Hermione delante o no:
- Que hasta estoy escocido, macho, mira, mira.
- Ehh, no, si yo te creo, súbete los pantalones, anda.
Algo así es lo que le dice a Harry en el tren. No sé, si yo fuera Harry quizás me plantería dormir en otra habitación, sólo por si acaso.
Pero claro, para los nuevos espectadores, que se perdieron antes joyas del 7º arte como La Orden del Fénix (no recuerdo qué sucedió en toda la peli, así de intensa fue), hay que aclarar todo, no vayan a pensar lo que no es:
Dumbledore, que es gay (y este es probablemente el único dato serio de esta crítica), se interesa misteriosamente por la vida privada de Harry:
- Y, ejem... dime, Harry... ¿esa rubita con la que vas por ahí?, Esto...
- Ah, no, señor, o sea, es mi amiga y tal...
- ¿Follamiga?
- ¿Cómo? Ah, no, qué va, amiga a secas...
- Entiendo. Eso quiere decir que...
- Señor, temo decepcionarle, pero eso que está tocando es mi varita mágica, que la llevo en el bolsillo, y me gustaría irme ya.
- ¡Harry, una vez más, debo pedirte demasiado!
- Ehhh... sí, claaaro, el caso es que... ¡tengo clase ahora! ¿Este año el profesor de defensa de las artes oscuras no es un desconocido, lacayo de Voldemort?
- No; este año no. Visto lo visto, hemos decidido poner a alguien de confianza.
- Pues no se ofenda, pero ya iba siendo hora, porque jooooder...
Y llegamos así a uno de los puntos fuertes del film: por una vez una vez el nuevo profesor de defensa contra las artes oscuras NO es el malo de la peli. ¿No sé, no se mosquean un poco? Quiero decir, ¿no deberían estar atentos con quién contratan cada año, y eso? Mirar el currículum antes o una encuesta, como en EEUU:
¿Soy un esbirro encubierto de Lord Voldemort y tengo la intención de destruir a Hogwarts/Dumbledor/Harry Potter/la civilización tal y como la conocemos?
S/N
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Volviendo a lo de la libido (sin la srta Rottenmeyer controlando, los chavales creo que hasta tienen máquinas de condones mágicas en los lavabos de Hogwarts), al final no se sabe bien por qué a Ginny le va Harry, y está a punto de hacerle una limpieza de sable con la excusa de no sé qué cordón desatado, pero lo impide oportunamente un ataque mortífago en una película apta para menores.
Por otra parte, Ron tiene sueños húmedos con Hermione, con tal mala pata que la Cheerleader ninfómana le pilla y corta con él. Vía libre para Hermione, que le coge la mano tras decir que a ella le mola más, y le mola de mucho antes, muy sutilmente.
Un aspecto muy sutil que nadie ha apreciado, es que a Draco le mola (y mucho) Harry. Ello le añade tensión dramática a la escena de las duchas, dotándola de un sutil plus metafórico. Fijaos en que Draco se pasa media película experimentando para que le funcione lo de entrar y salir del armario.
Además de salir del armario, la peli es una revisitación de clásicos Disney como Dumbo:
- Tú no te preocupes, Ron, que te he puesto la pluma mágica en el sombrero/poción mágica en la copa para que te las pares todas.
- Soy el puto amo, no veas cómo chano con la pluma mágica que me las paro todas y más, que voy mazo de buen rollo, tron... Elputamo, ¿que no? ¡Yujuuuuu!
[Más tarde]
- En realidad, no le puse la poción mágica: él tenía la fuerza interior, como en Final Fantasy.
- Ahhh... ¡Qué inesperado! (Creo que incluso había un niño de 3 años en la sala que nunca había visto antes nada parecido)
La peli es también una invitación al consumo de drogas sin complejo alguno. Que si hay que chutarse un éxtasis líquido, como hace el Harry, pues se lo chuta uno. En plan Trainspotting. O Padre de Familia:
- Haagrid, qué orejas tan suaves tieeenes... O sea, son como orejas de peerro...
- Es que estás tocando las orejas de mi perro, Harry.
- Sísísísí...
(O algo así era la escena, creo recordar).
Y bueno, en un momento dado, Dumbledore se la hace a Harry y le mete en todo lo oscuro de una cueva para buscar algo así como el Anillo de Sauron. Pero claro, aparece Gollum, que no le gusta que se lleven su anillo. Solo que esta vez lo han clonado. Pero que al final no vale de nada, y aparecen los malos en Hogwarts, Severus mata a Dumbledore (porque éste se lo había pedido, a todo volumen y a todo color, sutilmente, 5 minutos antes). Y después de matar a Dumbledore, pues se van como Pedro por su casa, y... ¡Ah, sí, que resulta que Severus es el Príncipe Mestizo! (No nos vayamos a salir del cine sin haber resuelto ese misterio intrigantísimo que daba la importancia a toda la película y que se resuelve gradual y magistralmente a lo largo de un film con un excelente montaje).
[Severus]- ¡Yo soy el príncipe mestizo!
[Harry]- Ehhh... si le soy sincero, me la bufa. Total, sólo he estado usando su libro y luego lo he escondido como excusa para darme el lote con Ginny en el almacén...
Y de eso, queridos amigos, va la película.
Por otra parte, Ron tiene sueños húmedos con Hermione, con tal mala pata que la Cheerleader ninfómana le pilla y corta con él. Vía libre para Hermione, que le coge la mano tras decir que a ella le mola más, y le mola de mucho antes, muy sutilmente.
Un aspecto muy sutil que nadie ha apreciado, es que a Draco le mola (y mucho) Harry. Ello le añade tensión dramática a la escena de las duchas, dotándola de un sutil plus metafórico. Fijaos en que Draco se pasa media película experimentando para que le funcione lo de entrar y salir del armario.
Además de salir del armario, la peli es una revisitación de clásicos Disney como Dumbo:
- Tú no te preocupes, Ron, que te he puesto la pluma mágica en el sombrero/poción mágica en la copa para que te las pares todas.
- Soy el puto amo, no veas cómo chano con la pluma mágica que me las paro todas y más, que voy mazo de buen rollo, tron... Elputamo, ¿que no? ¡Yujuuuuu!
[Más tarde]
- En realidad, no le puse la poción mágica: él tenía la fuerza interior, como en Final Fantasy.
- Ahhh... ¡Qué inesperado! (Creo que incluso había un niño de 3 años en la sala que nunca había visto antes nada parecido)
La peli es también una invitación al consumo de drogas sin complejo alguno. Que si hay que chutarse un éxtasis líquido, como hace el Harry, pues se lo chuta uno. En plan Trainspotting. O Padre de Familia:
- Haagrid, qué orejas tan suaves tieeenes... O sea, son como orejas de peerro...
- Es que estás tocando las orejas de mi perro, Harry.
- Sísísísí...
(O algo así era la escena, creo recordar).
Y bueno, en un momento dado, Dumbledore se la hace a Harry y le mete en todo lo oscuro de una cueva para buscar algo así como el Anillo de Sauron. Pero claro, aparece Gollum, que no le gusta que se lleven su anillo. Solo que esta vez lo han clonado. Pero que al final no vale de nada, y aparecen los malos en Hogwarts, Severus mata a Dumbledore (porque éste se lo había pedido, a todo volumen y a todo color, sutilmente, 5 minutos antes). Y después de matar a Dumbledore, pues se van como Pedro por su casa, y... ¡Ah, sí, que resulta que Severus es el Príncipe Mestizo! (No nos vayamos a salir del cine sin haber resuelto ese misterio intrigantísimo que daba la importancia a toda la película y que se resuelve gradual y magistralmente a lo largo de un film con un excelente montaje).
[Severus]- ¡Yo soy el príncipe mestizo!
[Harry]- Ehhh... si le soy sincero, me la bufa. Total, sólo he estado usando su libro y luego lo he escondido como excusa para darme el lote con Ginny en el almacén...
Y de eso, queridos amigos, va la película.

6,6
54.922
5
1 de noviembre de 2012
1 de noviembre de 2012
3 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Una vez más, Hollywood trabaja con varios guiones a la vez y cuando los quieren integrar sale una chapuza. Me explicaré: en esta peli hay 2 villanos de Bond pertenecientes a 2 guiones distintos:
- Un genio informático, que usa los ordenadores para hackear al MI6, burlar a sus especialistas, hacerse con un imperio. Tiene una mente fría y calculadora, con planes calculados al milímetro.
- Un ex-agente del MI6, traicionado y psicótico, que utiliza el miedo, un pavor horrible que infunde en la gente, como medio para lograr sus fines.
A pesar de la buena actuación de Bardem (por cierto, lamentable que lo tengamos que oír doblado al español), no logro integrar los rasgos de personalidad en el sr. Silva. Es decir, un absoluto genio informático, y le vemos tocar un ordenador 3 segundos, para leer las puntuaciones de Bond en sus tests. El personaje necesita más consistencia (la prueba del vaso sí refuerza su personalidad psicótica, por ejemplo).
A cambio, parece que profundizamos más en el personaje de Bond, pero, sinceramente, no era necesario. Sean Connery se reiría desde su tumba (si no fuera porque aún no está muerto) al saber que han convertido a su odiado agente secreto en escocés... Huérfano y escocés, vale. Pero eso no me dice gran cosa, no convierte un personaje plano en uno tridimensional.
Si todas las pelis de Bond se miden a la altura del villano, esta tiene un 5. No por la actuación, sino por lo mal caracterizado que está.
- Puntos a favor: por fin Londres aparece como mucho más que el telón de fondo en una peli de Bond. Iba siendo hora. Los actores están bien. Acción bien rodada.
- Puntos en contra: villano mal caracterizado, el rollo "vuelvo de la tumba" ya está muy visto, el ritmo de la película es errático y termina con una aventura a lo McGyver, y (ver spoiler).
Si los malos no dicen "Señor Bon", sin "d" final, no son los auténticos.
- Un genio informático, que usa los ordenadores para hackear al MI6, burlar a sus especialistas, hacerse con un imperio. Tiene una mente fría y calculadora, con planes calculados al milímetro.
- Un ex-agente del MI6, traicionado y psicótico, que utiliza el miedo, un pavor horrible que infunde en la gente, como medio para lograr sus fines.
A pesar de la buena actuación de Bardem (por cierto, lamentable que lo tengamos que oír doblado al español), no logro integrar los rasgos de personalidad en el sr. Silva. Es decir, un absoluto genio informático, y le vemos tocar un ordenador 3 segundos, para leer las puntuaciones de Bond en sus tests. El personaje necesita más consistencia (la prueba del vaso sí refuerza su personalidad psicótica, por ejemplo).
A cambio, parece que profundizamos más en el personaje de Bond, pero, sinceramente, no era necesario. Sean Connery se reiría desde su tumba (si no fuera porque aún no está muerto) al saber que han convertido a su odiado agente secreto en escocés... Huérfano y escocés, vale. Pero eso no me dice gran cosa, no convierte un personaje plano en uno tridimensional.
Si todas las pelis de Bond se miden a la altura del villano, esta tiene un 5. No por la actuación, sino por lo mal caracterizado que está.
- Puntos a favor: por fin Londres aparece como mucho más que el telón de fondo en una peli de Bond. Iba siendo hora. Los actores están bien. Acción bien rodada.
- Puntos en contra: villano mal caracterizado, el rollo "vuelvo de la tumba" ya está muy visto, el ritmo de la película es errático y termina con una aventura a lo McGyver, y (ver spoiler).
Si los malos no dicen "Señor Bon", sin "d" final, no son los auténticos.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Uno de los duelos finales más anticlimáticos de la franquicia Bond. Le tiro un cuchillo por la espalda y lo mato. La verdad es que esperábamos algo más... Desaprovechado.
Más sobre Friman
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here