En comparación a su predecesora, esta vez sí hay una evolución de los personajes, aunque con unas actuaciones pésimas, el final de la película no tiene ningún sentido alguno. Eso sí, esta vez las escenas de gore están mejor conseguidas. Lo único salvable es la actuación de Lauren Lavera y de David Howard Thornton, que están algo mejor que sus compañeros.

Espero que para la tercera, ahora sí con un presupuesto bastante mayor, sea capaz de hacer una peli mejor no solo en el gore, sino en la trama y en la argumentación.

A pesar de que no soy una persona creyente, "Silencio" me pareció una película intensa y profunda. Martin Scorsese cuenta una historia dura e intensa sobre dos misioneros en el Japón del siglo XVII, y lo hace sin dar respuestas claras, solo muchas preguntas: ¿vale la pena sufrir por una fe? ¿Hasta dónde llega el sacrificio? ¿Tiene sentido creer cuando todo lo que recibes es silencio?

La actuación de Andrew Garfield es muy buena, y la película tiene una belleza visual que contrasta con el dolor que muestra. Eso sí, es lenta y exigente. Si no conectas con la historia, puede volverse pesada. Aun así, me pareció valiosa porque, incluso sin compartir la fe de los personajes, pude entender su conflicto humano: el choque entre convicción y realidad.

No es fácil de ver, pero sí deja pensando, y eso ya es mucho.

Valoración general: 7 de 10. (6,5)

Me parece una de esas películas que, aunque no sea para todos, te atrapan por su forma tan distinta de contar una historia. Desde el primer momento se nota que Tarantino quiere hacer algo diferente: no muestra el robo como tal ni le da tanta importancia a eso, sino todo lo que pasa antes y después, centrándose más en los personajes y en las conversaciones que tienen entre ellos más que en la acción.

A pesar de que, personalmente, no me gustan las películas con muchos diálogos, fue lo que más me gustó, sinceramente, se nota cuando algo está bien hecho. Siento que los personajes hablan como si de personas reales se tratasen: discuten tonterías, se insultan, bromean... pero todo eso sirve para mostrar quiénes son. La tensión va creciendo poco a poco, y aunque la mayor parte de la película sucede en un solo lugar, nunca se siente aburrida.

Eso sí, se nota que es una película de bajo presupuesto. A veces se alarga en conversaciones que no van a ningún lado, y si no te gustan las películas con muchos diálogos y poca acción, puede hacerse algo pesada. También hay bastante violencia y sangre, así que no es para todos los gustos.

Esta película dirigida por el mismísimo Tarantino, es una locura genial que mezcla guerra, humor negro y momentos super tensos. Cada escena está cargada de personalidad, y los personajes, sobre todo el villano que hace Christoph Waltz, se roban toda la atención. Las actuaciones son buenas.

Tarantino sabe cómo meter diálogos largos que, aunque parecen tranquilos y que en algunos momentos pueden llegar a parecer un poco pesados, te tienen agarrado al asiento debido a la tensión que surge en cada momento. También hay que decir que su forma de contar la historia real es muy libre, y eso no va a gustarle a todo el mundo.

En general, es una película intensa, divertida y con un estilo único: si te gusta su rollo, seguro la vas a disfrutar mucho. Por lo tanto, mi veredicto y nota para esta obra es de un 8 sobre 10.

Historia contada por el director Sean Baker sobre los sucesos que le suceden a una escort de la noche, interpretada por Mikey Madison, que su vida cambia cuando conoce a un rico ruso… La película deja mensajes claros y contundentes de las condiciones miserables que tienen que aguantar las escort o chicas de compañía, pero a la vez el largometraje se ve visualmente hermoso, por cómo se graba y los colores que utiliza.

Lo malo que tiene Anora es que se hace algo larga, y no pasa nada durante muchos minutos. Se puede decir que la trama es algo floja, en donde la actuación de Mikey Madison sobresale y es lo mejor que tiene la película.

Teniendo en cuenta todo lo comentado anteriormente, le doy un 6 sobre y 10. No es un largometraje para todos los públicos, por lo que se cuenta y por la extraña manera que tiene de dirigir el director, que a mí personalmente no me gusta mucho.