Así es...
si eres capaz de jugar con el cine y disfrutar las reglas del género, este filme te complacerá como pocos.
Si crees que hay que analizar linea por linea el guión y su coherencia... si ves en la trayectoria de Rodríguez un avance o un retroceso... si crees que algunos encuadres o actuaciones no son lo suficientemente buenos...
Seguro que te equivocaste de película...
Para disfrutarla, solo hace falta entregarse al juego que es el cine barato, aquel de los programas triples (tres películas por el precio de una), en unas butacas con mal olor y que sufrían por mantenerse en pie.
Un poco de risa, algo de aburrimiento, giros inesperados... y poder salir de la sala al baño, sin temor a perder nada importante...
Gran película ...

Seguro que muchos como yo corrieron a ver la última película de González Iñárritu, buscando quizás un filme a la altura de Amores Perros o 21 gramos, o que incluso pudiera superarlos.
Mi sensación es que se trata una obra de factura impecable, la fotografía, la música y el cuidado guión le dan una categoría superior a lo que vemos comúnmente, aunque no llegue a superar a los filmes que la antecedieron.
Me gustaron las actuaciones de la mayoría de los protagonistas, y especialmente la sección final de la película, que simplemente conmueve e hipnotiza.
Sólo puedo señalar como objeción algún exceso en el tratamiento de las historias en la búsqueda de conmover e impactar y algunos giros del guión que parecieran dejar aspectos poco resueltos.
En todo caso, son sólo aspectos menores en el contexto de una gran película que bien merecido tiene el reconocimiento internacional.

Un filme con Vincent Gallo de protagonista siempre será atractivo, y si le sumamos a Jerzy Skolimowski, uno puede suponer que algo bueno se nos viene.
Lamentablemente no puedo decir nada para engrandecer la película más alla de la buena actuación de Gallo y una linda fotografía. Una historia mil veces contada, con un mensaje (si lo hay) demasiado oculto o demasiado obvio.
Quizás soy yo el que no entendió nada.