Me pareció una película con un guión muy flojo, insustancial. Por otra parte el sonido en muchas ocasiones era pésimo, no se entendía lo que decían muchos actores, especialmente y exageradamente el que hacía de abuelo, Juan Diego, y el protagonista Àlex Monner.
No sabemos si el problema era la toma de sonido directo o que Monner simplemente no vocalizaba. En muchos momentos sobre todo en las digresiones entre dientes de Juan Diego eché de menos un poco de subtitulado.
El director plantea demasiados personajes que no tienen un mínimo desarrollo o recorrido. Vi la película en una plataforma, si la hubiera visto en un cine concentrado en la escasísima trama probablemente me hubiera resultado más insulsa aún.
Estas esperando que el relato destaque en algún momento, pero todo son vaguedades. Destacable la filmación del skyline nocturno de Benidorm, quizás poco explotado hasta ahora en la narrativa cinematográfica hispana.

Es una garantía ya de principio que esté producida por la BBC. Bellas imágenes de los famosos acantilados de Dover. La protagonista es una inglesa de piel blanquísima que ha abrazado el Islam, la actriz que representa la esposa engañada hace un papel magnífico. Fahima es la protagonista, transita hacia Francia en transporte público. El autobús y el mundo de Fahima se montan directamente en el barco que le llevará a Calais donde tendrá que recomponer la visión de su marido. En Calais también se viven los encasillamientos a que se someten a una mujer magrebí. La BSO es muy sobria y contenida.
Una fotografía excelente tanto en interiores como en exteriores, se consigue una gama cromática muy delicada. Da gusto ver una película bien narrada sin pretensiones formales. Magnifica, lo dice un fan de John Ford, Sidney Lumet y otros narradores clásicos.

Serie británica que destaca por un diseño de producción muy costeado y realista. Las víctimas tienen una vertiente social, pues son mujeres arrastradas a la prostitución por la precariedad de la crisis económica que se vive en los tiempos del neoliberalismo de Margaret Hilda Thatcher.
Da grima ver esas paredes de papel pintado cubiertas de grasa, esas familias desestructuradas con hijos que asumen papeles de adulto desde muy temprana edad, esas cenas y esa vergüenza frente a los vecinos por las quiebras económicas.

Un documental sobre un escritor que resulta muy interesante aunque se repitan cuestiones sobre Francisco Umbral muy conocidas para los que hemos seguido su trayectoria literaria y vital. Noto ciertas ausencias notables en la galería de entrevistados.
Así la profesora titular de Literatura española e hispanoamericana de la Universidad de Barcelona, Anna Caballe, escribió un libro muy riguroso sobre Umbral donde se desvelaban por primera vez los orígenes familiares que el escritor siempre ocultó o se reflejaban también los vaivenes políticos del mismo. El título del libro era Francisco Umbral, El frio de una vida y fue editado por una editorial importante, creo que en Espasa.
Caballé tuvo que prescindir de la colaboración de Umbral para este trabajo, por el empeño de este autor en mantener "las fábulas sobre su vida".
Tal vez ha tenido que haber algún veto de la viuda a la profesora. España sí que colabora y mucho en el documental haciendo declaraciones abundantes y revelando aspectos muy personales y dejando filmar los interiores de la “dasha”. También me parece resaltable la ausencia de Juan Luis Cebrián que fue quien le encargó la famosa sección de cotilleos en el diario El País. De todas formas el documental es muy recomendable.

La película se inicia lentamente para que te vayas situando en el entorno de esta familia argelina que tuvo que escapar de su país para evitar una muerte segura. Todo parece felicidad en ese mundo idílico canadiense donde los emigrantes tienen muy buena acogida. El instituto donde estudia Antigone es multiétnico y ella es muy buena alumna.

Un suceso repentino hace que la película cambie totalmente de ritmo y el paraíso canadiense se transforme en un infierno. Se plantean a partir de ese momento muchos temas en una película muy ambiciosa. Temas que se tratan con una gradación de grises muy importante para reflejar esa realidad compleja contemporánea: influencia en la política y en la judicatura de lo que se reivindica en las redes sociales.
También se abordan temas éticos como la defensa de los valores familiares aunque vayan acompañados de comportamientos ilegales. El casting de los actores de origen árabe como de los canadienses es magnifico y una breve pincelada basta para situarlos en el contexto. Ninguno de los secundarios es gratuito.
También destacaría el valor que se atribuye en la película al contacto con la naturaleza. Te imaginas ciudades canadienses donde la integración de espacios forestales y lacustres en la trama urbana se vive como algo natural y necesario. Antigone en los peores momentos de la película tiene que recurrir a un contacto estrecho e incluso asalvajado con estos territorios.
Como dice Jorge Reichmann: "Se lo debemos todo a las plantas y los árboles. Y la salida del apocalipsis climático hacia el que vamos sería permitirles que nos salvasen: autolimitación humana y reforestación masiva."