La idea original de El Curioso Caso de Benjamin Button es brillante. De hecho, sólo de oírla te entran ganas de ver esa película, a ver qué pasa. Sin embargo, la película sólo se queda ahí. No consta de un argumento que dé vida a la historia. Simplemente se trata de contar la historia de un hombre que no tiene interés en ningún momento. Es como si cuentan mi historia y la ponen en el cine. Es posible que guste a unos pocos (a los que me hayan conocido, nada más), pero al resto les parecerá una vida más de tantas, sin nada que aprovechar.

Partiendo de que la película apenas consta de argumento, sólo le podría salvar que la historia del personaje fuera atrayente, pero no es así. Se trata de un personaje que va deambulando por la vida, se acuesta con multitud de mujeres, no tiene un rumbo fijo, lo cual refleja una vida aburrida y desaprovechada. Por lo tanto, no estoy dispuesto a estarme dos horas y media delante de la pantalla para ver eso.

Por otro lado, y de ahí sus 3 Oscars, la película está muy bien lograda técnicamente, con un Brad Pitt que encarna al personaje en todas sus fases de la vida: de viejo y de joven; cosa ardua y difícil y que se logra con brillantez. De todos modos, deja bastante que desear el doblaje en español de Brad Pitt cuando es viejo, ya que fuerza muchísimo la voz, que no queda del todo bien. Por lo tanto, es una película prescindible por su historia y duración, y que decepciona si atendemos a su original idea y su magnífico director.