Una película para quitarse el sombrero. Trata sobre muchas cosas, sobre el amor familiar, sobre el socialismo, sobre el capitalismo, sobre hechos históricos, sobre vidas entrelazadas pero sobre todo habla acerca de cómo es imposible resistirse a los cambios o evitarlos. Esta película remueve la base fundamental de la nostalgia.

Otra prueba más (y ya van...) de que no es necesario contar con grandes presupuestos para realizar buenas películas. No, no es en absoluto necesario. Basta con una buena idea, nada más, y luego creer en ella y apostar por ella.

Para mí no es en absoluto una comedia, pese a contar con momentos muy divertidos, ni un drama pese a contar con momentos muy tristes. Es una historia que, pese a lo disparatado, podría ser real porque juega con emociones reales. Una delicia.

Lo mejor: La originalidad. También el compromiso de los actores.

Lo peor: Que películas como esta no tengan toda la repercusión que debieran.