Dirigida por David Leitch y protagonizada por Ryan Gosling, Emily Blunt, Aaron Taylor-Johnson, Winston Duke y Hannah Waddingham.

Sinopsis

Es doble de acción y, como todo el mundo en la comunidad de dobles de acción, explota, recibe disparos, se estrella, atraviesa ventanas y cae desde las mayores alturas, todo para nuestro entretenimiento. Y ahora, recién salido de un accidente que casi acaba con su carrera, este héroe de clase trabajadora tiene que localizar a una estrella de cine desaparecida, resolver una conspiración e intentar recuperar al amor de su vida sin dejar de hacer su trabajo diario. ¿Qué podría salir bien?

Cuando el entretenimiento cae en buenas manos, es posible que nos llevemos una sorpresa absoluta, como es lo que sucede con esta maravillosa película que resulta ser The Fall Guy. Las buenas manos son las de un director que sabe lo que quiere y lo que hace como David Leitch y tener a dos estrellas del momento como lo son Ryan Gosling y Emily Blunt como reyes de la función, desde ahí todo lo que venga ya significa un plus adicional.

El simple, pero divertido guion de Drew Pearce toma vuelo una vez que toda la acción comienza y nos damos cuenta de que estamos pasándolo de maravilla frente a la pantalla en donde estamos recibiendo una comedia romántica de acción que en su corazón ofrece una carta de amor a una de las profesiones más bellas del cine como son los de los especialistas de acción. Esa mezcla funciona en todas sus aristas y es lo que uno más puedes valorar del resultado logrado por Leitch y compañía, ya que nunca pierden la intención de darnos un blockbuster de esos que todos buscamos, pero sin dejar de lado su propia sangre que ha cosechado en la vida.

Es puro entretenimiento, realizado con amor, pasión y maestría, que a su vez es presentado por artistas que se preocupan por su trabajo y quieren que el espectador sea feliz. Logran darnos un auténtico espectáculo visual y de comedia en partes iguales en donde saben aprovechar el carisma de sus protagonistas y la increíble química que transmiten. Pero si tenemos a uno que destacar de manera puntual es a Ryan Gosling, que cada vez hace más necesario a nuestras vidas su lado cómico con el cual te disfrutas cada interacción y cada diálogo que entrega con todo ese ángel y que ha llevado a su máximo esplendor.

La experiencia y el aprecio de Leitch por los dobles de acción añaden una capa entrañable para que disfrutemos de toda la acción en pantalla, la astucia con que nos lleva al detrás de escena de la película dentro de la película es lo que te hace valorar toda aquella oda a sus inicios en la industria y su propio homenaje a sus especialistas. La mirada más auténtica y más honrada por parte del director a una profesión que lo hizo brillar, pero que también lo vuelve a ayudar con escenas espectaculares y secuencias realmente divertidas, en donde el director baja algunos cambios a sus anteriores trabajos, pero se permite ser más maduro para dar el equilibrio entre el espectáculo y la mecánica. Enseña al público a apreciar la cantidad de personas que se necesitan para llevar a cabo un accidente automovilístico o un truco con la antorcha humana.

Y por cierto, el director también usa su habilidad para darnos una comedia romántica con todos los clichés posibles, pero que son manejados de forma correcta, lo cual nos hace estar en presencia de una de las grandes comedias románticas del año y eso sí que es una absoluta sorpresa.

Es una película que seguramente será una de las más taquilleras del año y también con méritos propios una de las grandes películas que nos dejó este 2024. Es un auténtico placer disfrutarla, quererla y apreciarla, es una película que cumple con todo lo que promete y también con darte los mejores 126 minutos frente a la pantalla.

Me quedo con sensaciones demasiado agradables en donde encuentro un emocionante espectáculo de gigantes proporciones y aunque no es la mejor película de Leitch, pero probablemente sea su película más cálida, sincera y entrañable en donde el director se consagra con la industria y el espectador de una vez por todas.