Pixar nos propone esta precuela de Monstruos S.A, la cual era una notable película.
En esta película el comienzo es esperanzador, ya que antes de los títulos de crédito nos disponemos a una escena entrañable que nos recordaba grandes momentos de la anterior. Pero ese primer momento se va transformando a una película peor, una mezcla entre lo malo de Harry Potter y de las películas de Dreamworks. Por lo tanto se da prioridad a la acción y el humor, pero sin un guión detrás que mezcle esos momentos con otros totalmente adultos. Reconociendo que en la primera mitad tiene alguna escena divertida y que nunca aburre, nunca está al nivel del último tercio. En esta última parte el guión da un giro, llegan algunas sorpresas, se vuelve más entrañable e incluso hay un homenaje a las películas de terror. Hemos tenido que esperar una hora para encontrarnos con un Pixar que mantiene sus señas de identidad, bienvenido a ese universo más adulto y parecido a la animación que se hace en Europa, además con unos medios económicos superiores que permite disfrutar más de esas escenas de acción. Gran aparición del personaje de Hardscrabble, pero sobre todo conocer los primeros momentos en donde se conocieron Mike y Sullivan.