Anthony Minghella nos regala una historia de amor atípica con la guerra civil estadounidense como telón de fondo y muy bien llevada por su trió protagonista y con fantásticos secundarios. Épica por momentos y de impecable factura. Un drama romántico que alguno quizá la podría tachar de cursi. Para quien así opine me imagino que le habrá resultado larga y tediosa si ya la ha visto. Y para quien no lo haya hecho aún que piense en lo que cree que representa el amor incondicional e imperecedero.