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Voto de cherburgo:
6
23 de mayo de 2014
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A mediados de los 90, un día en el local donde realizaba la Prestación Social Sustitutoria uno de los objetores (uno que se daba ínfulas de intelectual y al que con los años he perdido la pista) trajo esta peli en VHS. En algo había que pasar el rato. En aquel salón, junto a una estufa de butano, vimos aquella extraña película con una buenísima banda sonora. La dirigía un tal Peter Greenaway, de quien yo ya había visto "El vientre de un arquitecto". Sabía a lo que atenerme.
Con el paso de los años, el recuerdo de la peli se fue diluyendo, pero seguía recordando lo sobrecargado de los decorados, la truculencia del plato final, Helen Mirren desnuda, y esa extraña atmosfera donde los personajes van cambiando de la estancia roja a la blanca y de esta a la verde y al mismo tiempo cambian de color sus ropas.
Vista hoy, se me repiten aquellas mismas sensaciones. La peli es barroca, muy barroca. Tanto en lo sobrecargado de los escenarios como en el vestuario. Y es muy excesiva. Quizá demasiado. La violencia tanto verbal como explícita del brutal y cornudo marido, la morbidez de la venganza de la adúltera esposa...
La pega es que todo esto se queda en mero fuego de artificio al servicio de un argumento mas bien vacuo. La historia puede enganchar y ser original, pero no transmite ningún mensaje. A pesar de todo, en las dos horas de película no me he aburrido.
Con el paso de los años, el recuerdo de la peli se fue diluyendo, pero seguía recordando lo sobrecargado de los decorados, la truculencia del plato final, Helen Mirren desnuda, y esa extraña atmosfera donde los personajes van cambiando de la estancia roja a la blanca y de esta a la verde y al mismo tiempo cambian de color sus ropas.
Vista hoy, se me repiten aquellas mismas sensaciones. La peli es barroca, muy barroca. Tanto en lo sobrecargado de los escenarios como en el vestuario. Y es muy excesiva. Quizá demasiado. La violencia tanto verbal como explícita del brutal y cornudo marido, la morbidez de la venganza de la adúltera esposa...
La pega es que todo esto se queda en mero fuego de artificio al servicio de un argumento mas bien vacuo. La historia puede enganchar y ser original, pero no transmite ningún mensaje. A pesar de todo, en las dos horas de película no me he aburrido.