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Voto de piensaencines:
1
Comedia Año 2018. Torrente sale de la cárcel, y se encuentra aturdido ante una España convulsa y dividida. Debe encontrar respuestas en su interior para despejar su confusión, y por ello decide convertirse en un "fuera de la ley". Así que se propone atracar un casino con una banda de incompetentes. A través de un contacto de su estancia en prisión, localiza a John Marshall, la persona que se ocupó de supervisar la seguridad cuando se planificó ... [+]
8 de octubre de 2014
22 de 38 usuarios han encontrado esta crítica útil
A modo telegrama:
Esperaba una película. Como película era TORRENTE:EL BRAZO TONTO DE LA LEY, la cual siempre he defendido y seguiré defendiendo, por la originalidad de traer la caspa de las películas de humor/destape de los 70, por su humor trasgresor y porque de una manera malsana y enfermiza me hizo reír y me entretuvo.

Esperaba una película y me encontré un subproducto trasnochado, que trae toda la caspa del cine castizo de humor/destape de los 70 (léase el tandem Pajares/Esteso), pero sin gracia ni originalidad nI talento alguno.

Lo soéz, lo grosero, lo zafio, lo ramplón, lo burdo, lo chabacano, lo escatológico, lo vulgar, resulta gracioso cuando es mínimamente trasgresor y/o inteligente. Cuando no lo es, sólo resulta soéz, grosero, zafio, ramplón, burdo, chabacano, escatológico, vulgar...pero sobre todo, mediocre y aburrido.
Lo peor que se puede ser en este (y cualquier) mundo, es mediocre.
Y aburrido.

TORRENTE 5 es la mediocridad hecha números. Es el aburrimiento supremo. Es el regreso al pasado, al pasado superado, al que produce vergüenza y no añoranza.

TORRENTE 5 es una mieeeeeeeeeerda tan seca que ni siquiera se te pega a la suela de los zapatos.

¿Os parece poco cinematográfico mi análisis? Eso es porque cinematográficamente es igual de mediocre, en todos y cada uno de sus aspectos analizables...en alguno incluso patético.

Lamento y me disculpo públicamente por haber contribuido con mi entrada a engrosar las arcas de la pérfida maquinaria que se esconde tras esta lamentable franquicia. Y mientras rezo 28 rosarios y me fustigo salvajemente, me pregunto: ¡¡¿¿Hasta cuándo Dios mío, hasta cuándo??!!

P.D.: El único que hace gracia, que cumple, que tiene un papel, que sabe lo que hace y se molesta en hacerlo es Carlos Areces. El resto, directamente a un tanque de ácido, por favor
piensaencines
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