La película narra perfectamente una historia de amor en un futuro utópico o quizás distópico, en donde existe la clonación, los seres humanos pueden desarrollar habilidades por medio de virus, etc.
La historia de amor envuelve a la de ficción desde un principio, logrando cierta clase de fusión romance-nostálgico-futurista que me hicieron recordar a “Perdidos en Tokio” (Lost in Translation), por esa atmosfera cargada de la soledad de sus personajes principales que contrastaban con el ajetreo de la vida en ciertas ciudades.

La narración de la protagonista es casi poética y muy rica en detalles de su percepción de los hechos. Si fuera un libro estaría tentado a leerlo, se nota a veces, por la manera en la que ambienta sus secuencias, una melodía de fondo que hace parecer tan surrealista. La película está cuidada para interpretar las sensaciones y recuerdos, casi como en una novela narrada en primera persona.

Por otro, lado al anunciarse como ciencia ficción, dejará a algunos esperando por más acción, o simplemente que se apreciara un poco más de las maravillas tecnológicas en aquella otra realidad, porque a fin de cuentas es lo que se espera en una película de ciencia ficción, ¿No?
El ritmo de la película es lento, pero apropiado para la historia de amor, hay escenas que están muy bien logradas y que sin duda plasman la intención del director de crear una fantasía de amor desgarrador al estilo del ‘Gran Gabo’ (Gabriel García Márquez) adaptada a un mundo como el que imaginó Aldous Huxley en “Un Mundo Feliz”. Sin duda una mezcla interesante que vale la pena mirar y posiblemente la pondrás dentro de tus favoritas.