El crowdfunding sacó adelante este segundo largometraje de Jeremy Saulnier, y lo único que puedo gritar es: ¡bendito crowdfunding! En "Blue ruin" Jeremy Saulnier nos ofrece un minimista y nihilista thriller de venganzas casi cruzadas con la suficiente y necesaria personalidad, no solo ya para diferenciarla del resto, sino para que se nos olvide que ya hemos visto demasiadas historias de venganzas.
Una de las grandes virtudes de "Blue ruin", y creo que también lo será de aquí en adelante de su director, es el manejo de la intriga. La cinta mantiene al espectador en una continua tensa incertidumbre de noventa minutos que es gloria bendita, y algo que cada vez se pierde más fruto de un cine (mal)acostumbrado a dárnoslo todo demasiado mascado. Y al final ese misterio continuo que rodea a nuestro protagonista, y que casi ni se desvela en el desenlace del film, eleva una historia que, de otra manera, habría resultado mucho más corriente y desechable.
Y en esa intriga basa todo su potencial "Blue ruin" ya que en casi todo los demás la película roza continuamente lo amateur, haciendo que apenas pueda vivir de ello. Técnica y artísticamente todo correcto con su aroma a homemade, aunque con un Macon Blair estupendo. El guion en cambio si que destaca siendo bastante sólido a pesar de que la trama no siempre transita caminos fáciles.
Al final "Blue ruin" sirve más como rotunda carta de presentación para Jeremy Saulnier que como cinta que vaya a pasar a la historia. Es una buena película que ojala nos anticipe lo que este cineasta puede llegar a darnos.