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Voto de Pedro Soberano:
8
6,0
5.348
Comedia. Acción
Kid y Ben, amigos pero rivales, participan en una carrera de coches cuyo premio es un estupendo "dune-buggy", un minibólido rojo con capota amarilla. Después de innumerables peripecias, Kid y Ben llegan juntos a la meta, por lo que el minibólido les pertenece a los dos. Kid propone que se lo jueguen a "cervezas y salchichas".
26 de marzo de 2013
4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tiene el mérito de provocar sonoras carcajadas sin distinción de sexo, edad o condición social, sirviéndose de un humor tan sencillo como eficaz.
Bud Spencer y Terence Hill formaron una pareja irrepetible, que dejó huella entre quienes rebobinábamos el video para revisar otra vez las mejores jugadas en forma de hostias frescas y crujientes, repartidas con alegría y generosidad. Era importante que tales bofetadas nunca fueran excesivamente expeditivas, para que los receptores de los susodichos guantazos volvieran a por más con los ánimos todavía intactos.
Entre sus multiples situaciones graciosas se encuentran siempre dos gags que siguen pareciéndome geniales:
-Si durante el alboroto de la pelea suena un teléfono, es obligado parar, descolgar el auricular y que el incauto de turno al que supuestamente se reclama al aparato reciba su correspondiente sopapo por parte de Bud.
-Durante la trifulca, Terence se ensañará con alguien de un modo especialmente educado, luciendo en todo momento una cordial sonrisa y excelentes modales para quien esta recibiendo una soberana paliza.
Bud y Terence, dos tipos geniales, dos heroes de carne y hueso con quienes pasar hora y media de lo más agradable. Las risas, en este caso, estan aseguradas.
Bud Spencer y Terence Hill formaron una pareja irrepetible, que dejó huella entre quienes rebobinábamos el video para revisar otra vez las mejores jugadas en forma de hostias frescas y crujientes, repartidas con alegría y generosidad. Era importante que tales bofetadas nunca fueran excesivamente expeditivas, para que los receptores de los susodichos guantazos volvieran a por más con los ánimos todavía intactos.
Entre sus multiples situaciones graciosas se encuentran siempre dos gags que siguen pareciéndome geniales:
-Si durante el alboroto de la pelea suena un teléfono, es obligado parar, descolgar el auricular y que el incauto de turno al que supuestamente se reclama al aparato reciba su correspondiente sopapo por parte de Bud.
-Durante la trifulca, Terence se ensañará con alguien de un modo especialmente educado, luciendo en todo momento una cordial sonrisa y excelentes modales para quien esta recibiendo una soberana paliza.
Bud y Terence, dos tipos geniales, dos heroes de carne y hueso con quienes pasar hora y media de lo más agradable. Las risas, en este caso, estan aseguradas.